Wonderful Storm ➳ M.Y.G;BTS

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Seolhyun pasó el día entero pensando en el chico.

Estaba ahora segura que le gustaba, pero ¿Y ella a él? ¿Qué tenía él en su cabeza?

Tal vez también gustaba de ella, tal vez no, tal vez era de esos chicos que decidían tener la atención de las chicas solamente, pero ella sabía que Yoongi no era de ese tipo.

¿Qué hacer?¿Decirle, aguantarse, llorar, aventarse de un quinto piso?

Decidió tomar toda la valentía del mundo, tenía que decir lo que sentía, fuera ahora o después, necesitaba saber si era correspondida, por más infantil que sonara.

Ahora o después. Decidió que fuera ahora.

Después de caminar por toda la sala unos 10 minutos, deteniéndose de vez en cuando para darse pequeños golpes en la cabeza con la pared, tomó de nueva cuenta las llaves y salió camino a aquel apartamento.

En el camino pensó bien si era una buena o una mala idea, después de todo, cualquier cosa podía pasar, tanto como que el chico le correspondiera, como que terminara por cagarla y que el chico se alejara de ella.

Estaba más que nerviosa. Después de todo era Min Yoongi, era tan capaz de cerrarle la puerta en las narices sin más y dejarla ahí parada.

Llegó a su destino. Era tiempo.

Subió hasta el piso correspondiente, buscó el apartamento y dio tres suaves toques a la puerta. Sus manos sudaban. Soltó un suspiro alejando los nervios.

Tardaron en abrir. Pero Seolhyun sintió como todo su mundo se le vino encima cuando abrieron.

Definitivamente, cualquier cosa podía pasar.

-¿Buscas a alguien?- preguntó una chica envuelta en una sábana, claramente no usaba nada más debajo.

-Yo...- comenzó a decir Seolhyun cuando identificó una silueta detrás de la chica que se detuvo al reconocerla.-  Me equivoqué, disculpa.- dijo mirando a Yoongi, su mirada era neutra, fría, las ilusiones de Seol se fueron hasta el suelo.

Hizo una pequeñísima reverencia y se marchó.

De regreso a su casa su vista comenzó a nublarse, pero no podía permitirse llorar por un chico que apenas conocía, fue su culpa por hacerse ilusiones basándose en acciones mínimas. Era su culpa.

Estúpida, mil veces estúpida se repetía Seol. Pasó de la desilusión a la ira.

Llegó y entro a su casa.

-Seolhyun.- habló Hoseok levantándose rápidamente del sofá. Mientras Namjoon hacía lo mismo.- ¿Qué pasó?¿Estás...-

-No me molesten.- dijo la chica con fastidio subiendo a su habitación para después dar un portazo.

Se sentó en la cama.

Se sentía orgullosa por no haber llorado. Se cambió a su pijama, iba directo a dormir aunque apenas fueran las 8.

-Me importas Seolhyun.- definitivamente ella se había equivocado en eso. O tal vez no, tal vez ella lo tomó con otro sentido. Bah, que más daba ya.

En cuanto cerró los ojos recostada en su cama, sintió como sus mejillas se humedecieron.

-Torpe Seolhyun.- se dijo a sí misma.