SEXTO ENCUENTRO - ¿EL FINAL?
Por un momento siento, y de pronto ya no. Estoy consciente, mas no me siento a mí misma físicamente. Es como si distintas partes de mi viajasen hacia un mismo destino, aunque no me refiero del todo a lo físico; es algo más. De pronto siento como si estuviera cayendo dentro de mi misma, y así es como recupero mi forma física nuevamente. Abro los ojos e intento enfocar la vista, sintiéndome terriblemente mareada e inestable, casi al punto de vomitar. Me fuerzo a mi misma a no hacerlo, intento tomar aire para calmar las molestias y evitar cualquier accidente, y enfoco mi atención en la voz que sutilmente surge en mi cabeza para intentar calmarme. Va funcionando poco a poco.
Finalmente vuelvo a abrir los ojos y veo a mi alrededor; es como si pudiese ver una panorámica del universo entero. Mezclas infinitas de colores que reconozco con muchos otros que nunca había visto en mi vida, todos tomando formas distintas, algunas más definidas que otras, muchas de mayor longitud y densidad que las anteriores, todas con tonalidades diferentes, pero armando un conjunto de lo más maravilloso, extraordinario e indescriptible que pudiese existir. Y la mejor parte es que existe. Pequeños destellos, y otros más grandes acompañan a cada cúmulo de colores, casi como si los estuviesen enmarcando, muchos otros regados por el espacio.
El tiempo parece estar estático, se nota una calma inmensurable en cada uno de los que se encuentran a mi alrededor, sin embargo se les ve bastante familiarizados con lo que acabamos de llevar a cabo. Por mi parte, continúo sintiéndome un tanto desorientada y mareada, aunque verdaderamente asombrada, y creo que pueden notarlo, sobre todo por las miradas discretamente efusivas que lanzan en mi dirección. Una pequeña sonrisa se asoma en mi rostro, aunque no estoy del todo segura de la razón. Mi pulso se desacelera un poco, casi regresando a la normalidad, y mi vista se torna menos borrosa aún, lo cual me permite visualizar los objetos más próximos a mi con mayor claridad, dejándome más maravillada, pero confundida de lo que ya estaba. En realidad, no son objetos en sí a los que me estoy refiriendo; logro vislumbrar lo que parece ser la silueta de plataformas a distintos niveles, sin embargo las percibo más como vibraciones que como siluetas en sí. También veo este tipo de "siluetas" dando forma a paneles verticales, finalmente cerrando una cubierta sobre nosotros, como si fuese una especie de cápsula enorme. Algunas de estas plataformas y paneles son traslúcidos y otros transparentes, dejando pasar las distintas luces emitidas a todo nuestro alrededor. Ellos se forman a manera de semicírculo, dejándome a mi al centro, y posan su mirada sobre mi. Sigue siendo una mirada cálida y acogedora, aunque increíblemente solemne, la cual logra calmarme aún más.
Separo los labios con la intención de decir algo, cuando de inmediato caigo en la cuenta y formulo la pregunta en mi mente.
- "¿Dónde estamos, exactamente?" – Un par de Ellos intercambian miradas, pero sólo Akrio responde, sin siquiera parpadear ni mover los labios.
- "No es precisamente un dónde, sino un cuándo. Y aún así, es algo sumamente complicado de comprender. Te llevaría tiempo."
- "Oportuno el uso de la palabra tiempo." – Respondo, a lo que Ellos sonríen. – "Pero, por qué me trajeron hasta aquí?"
Él mismo hace una pausa, me sostiene la mirada tranquilamente un par de segundos y se toma su tiempo para contestar mi pregunta.
- "Ya era momento". – afirma con confianza. – "Tomaste tu decisión."
- "Pero, ¿y los demás? ¿Mis padres, mis amigos, Payne, Desmond?" – insisto.
- "En este momento, en este punto, sólo puedes percibirte a ti misma. Sin embargo, cada individuo de tu planeta que sea merecedor tendrá esta misma oportunidad, luego de que consigas recuperarte y regreses para ayudarlos." – Esta respuesta no hace más que crearme más dudas aún.
Sigo cuestionándome qué quiere decir con "en este punto", a demás del hecho de que menciona únicamente a los "merecedores" de la oportunidad de la que yo estoy tomando parte. Pero, ¿en qué consiste? ¿Qué nos hace merecedores de ella? ¿Mi familia y mis amigos están entre esas personas? ¿Volveré a verlos? Aparentemente Akrio escucha todos estos pensamientos, ya que sonríe nuevamente con gentileza y avanza un paso hacia mi.
- "Tienes muchas preguntas aún". – indica. – "Intentaremos darte las herramientas para descubrir sus respectivas respuestas, mas no tenemos permitido involucrarnos demasiado. La mayor parte deberás hacerla tú, con nuestra guía, claro".
- "No sé cómo empezar". – confieso. Es un tanto abrumador el reparar en todo esto; el lugar – o tiempo – en el que estoy, la compañía que tengo a mi alrededor, pensar que soy merecedora...
Tomé una decisión, y creo firmemente en ella. Aunque esto no consigue zafarme de todas mis dudas.
Según Akrio, mis padres no notarán inmediatamente mi ausencia, sino hasta dentro de un tiempo. Luego, poco a poco irá siendo como si yo nunca hubiese existido para ellos, sin embargo yo sí seré capaz de recordarlos; mi paso por la Tierra será borrado hasta mi regreso, éste permaneciendo incierto incluso para Ellos. Dependerá de mi evolución y del tiempo que conlleve.
Cada quien regresa a sus respectivas labores, por lo que por fin consigo un tiempo a solas para contemplar más en calma todo lo que me rodea, ya sin intentar encontrarle deseperadamente una explicación; únicamente permito a mis ojos pasear por donde necesiten.
Me dejo caer sobre un desnivel y permanezco sentada ahí, hasta que Akrio se aproxima y hace lo mismo.
- "No suelo sentarme aquí, pero me agrada." – dice, denotando una gran tranquilidad. Le dirijo una sonrisa, la cual él apenas me devuelve, quizá porque Ellos no tienen esa costumbre tan marcada. Rápidamente se despoja de ella y adquiere un tono de mayor seriedad. – "Te fue muy drástico, ¿cierto? Este cambio."
- "No es a lo que estoy acostumbrada. Pero me agrada." – aseguro con la intención de evitar su preocupación, aunque sé que no tengo mucho éxito.
- "Aún estás a tiempo de retractarte." – añade dubitativamente.
- "No será necesario, Akrio. Sigo convencida y consciente de mi decisión. Sé que estoy donde debería estar."
- "A demás nunca estarás sola." – y lo sé. Sé que estas no son palabras vacías, no es lo que se dice por mera amabilidad o cortesía cuando alguien está pasando por un momento difícil. Son palabras con acción en ellas, con esperanza, lealtad. – "Será difícil y frustrante en muchas ocasiones, habrán obstáculos y batallas a las que tendremos que hacer frente. Pero, Ava, somos uno solo."
- "Lo sé. Aquí es a donde pertenezco."
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CONTACTO.
Science FictionAva descubre lo que hay detrás de sus sueños, guiándola a un sinfín de preguntas aún por responder. Cada respuesta lleva a varias posibilidades, varios destinos, pero es ella quien debe decidir el suyo.