CAPITULO 30

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Llevaba ya 1 mes desde que comenzó con los tratamientos. Ella estaba cada vez más cansada, con más dolores y con menos pelo. Matteo estaba cada vez más cercana a ella. El sabía que su esposa estaba sufriendo, el se daba cuenta de que ella no estaba bien. El la veía más flaca, con muchas ojeras.. el no sabía que hacer. Aunque todos los días una sonrisa le sacaba. Ella intentaba estar bien pero realmente se le complicaba,sus dolores le ganaban.
-En 2 días es tu cumpleaños Matt. Mi amor está cada vez más grande. -Dijo Luna agarrándole un cachete a su esposo
Era miércoles por la mañana, Luna ya se había hecho los rayos y tomado su pastilla de quimioterapia. Estaban tomando un café al frente del hospital donde ,usualmente, desayunan los días de rayos.
-Ni me lo digas.. 25.. Es increíble. -le respondió con tono melodramático
-No exageres -Dijo golpeándole el hombro despacio sonriéndole. -Que es lo que vas querer?-
-Ya con tenerte a ti es suficiente.-Dijo el y agarrando sus manos
La sonrisa de Luna desapareció y miro para abajo
-Que? -dijo su esposo en tono serio.
-Nada solo estoy media mareada.
Matteo pidió la cuenta y se fueron hacia su casa.
Al llegar Luna se fue a dormir. El aprovechó para irse al estudio.
Cuando ella despertó se quedo unos minutos mirando el techo.
No quería llorar pero no podía aguantar, Siempre estaba Matteo y no podía llorar al frente de el, sabría que se pondría peor de lo que ya está.
Ella sabía que no iba a durar para siempre, sabía que en poco tiempo iba a empeorar, sabía que pronto su vida.. llegaría a su fin.

Hasta que la muerte nos separe. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora