Decepción

2.5K 146 9
                                    

Holaaa!. Realmente disfrute mucho escribiendo este capitulo. A partir de ahora,  las cosas se pondrán mas interesantes. Yo doy todo de mi para escribir, si no es mucho pedir no pueden dejar un comentario opinando que piensan de la historia?. Los comentarios me ayudan a seguir adelante y no tengo tiempo para contestarlos, pero leo y  aprecio todos. Les agradecería de todo corazón un comentario. 

Hermione sonrió mientras pasaba la página de su libro en la sala común con sus amigos  a la semana siguiente de haber entregado el trabajo de Defensa Contra las Artes Oscuras. Esa semana había transcurrido sin muchos problemas, en realidad dentro de todo fue... feliz. Se volvió a enfocar en los estudios y todo iba bien con Theo. La hacía sentir feliz, querida y especial. Solo había una cosa que la inquietaba. Malfoy. Seguía sintiéndose muy culpable por haberse dejado llevar y besarlo a pesar de Theo. Y lo que más la hacia sentirse culpable es que no podía sacarse ese momento de la mente, no podía dejar de pensar en los labios de ella sobre los de él y eso la ponía furiosa, porque tenía un novio en el cual pensar, Malfoy no era nadie para que ella piense en ese beso que no había sido nada especial.

Ese día era sábado y había quedado con Theo, que pasaría por ella en un rato e irían juntos a Hogsmeade. El clima había bajado de manera rápida y estaban en noviembre, faltaba poco para la navidad. Hermione pensaba volver esos días con sus padres y no ir a la Madriguera con sus amigos, ya que los echaba mucho de menos. Después de haberles quitado la memoria, aunque fuera por su propio bien, sentía que debía recompensarles el tiempo perdido. 

Un mes después de la Batalla de Hogwarts,  ella, Harry y Ron y un medimago de San Mungo especialista en devolver la memoria a personar desmemorizadas fueron a buscar a sus padres a Australia. Fue difícil para los tres el reencuentro, enterarse lo que ella había hecho y que perdió la visión fue un golpe muy duro. Unas dos semanas después, luego de terminar de cerrar sus asuntos pendientes, los señores Granger volvieron a Londres y Hermione se fue finalmente a vivir con ellos, porque realmente era lo que necesitaba. Había pasado ese tiempo en la Madriguera, sintiéndose todo el tiempo una intrusa por ser una carga cuando la familia Weasley estaba pasando un duelo. 

Ron, Molly, Ginny y Harry la cuidaron muchísimo, pero todo era complicado. El Ministerio requería la presencia de Harry, Ron y de ella, especialmente del moreno. Sumándole los turnos médicos para intentar recuperar la visión. Poder volver a vivir con sus padres aunque sea solamente por unos meses le llenó el alma. Ahora extrañaba la calidez de su hogar y los añoraba.

- ¿Ustedes irán a Hogsmeade? - pregunto la castaña a sus amigos al notar que ya no le estaba prestando nada de atención al libro.

- Yo iré con Luna - contesto el pelirrojo y se puso rojo hasta las orejas. Últimamente se había dado tiempo para estar más con la rubia y hasta había compartido un par de besos con ella. Cada día pensaba más en ella y menos en su mejor amiga. Hermione sonrió al escuchar las palabras de su amigo ya que no era idiota y podía notar lo que se estaba gestando entre ellos dos.

 Ron  al ver el rostro deslumbrante de la castaña supo que sería difícil olvidarse de ella mientras le siga sonriendo así.

- No tengo muchas ganas de ir - refunfuño Ginny y Hermione no pudo evitar fruncir el ceño. Algo le pasaba a Ginny, lo notaba y no sabía por qué.  Cuando estaban solas las dos todo estaba todo normal, pero cuando estaba presente Harry la castaña notaba que la pelirroja estaba bastante incómoda y parecía culpable por algo. Se prometió que cuando estuviera a solas con la chica le preguntaría porque estaba así.

-¿No quieres ir? - le pregunto Harry pasando su pulgar por el dorso de la mano de la pelirroja, que de repente se soltó de su agarre.  El azabache la miro confuso.

Almas en Sombra y Luz (Draco Malfoy/Hermione Granger)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora