La Indomable |JB|

Capítulo12

               Amber's POV's
     Capítulo 12

Me parecía muy romántico todo esto que Justin había hecho. Me sentía bien y protegida. Me gustaba que tuviera estos detalles tan lindos. Mire al lado y mi felicidad desapareció por completo. El sobre misterios estaba allí. Y para ser sincera tenía mucho miedo de lo que pudiera decir.

—Hey ¿Qué pasa?—pregunto Justin llamando mi atención.

No sabía si decirle. Ya bastante involucrado estaba el con todo esto y no quería que saliera perjudicado. Así que opte por callar y negar con la cabeza.

—No me mientas Amber—reclamó e insistió.

Suspire y lo pensé un poco. El ya sabía acerca de todos los sobres anteriores. Los había estudiado y había prometido ayudarme.

—Ayer en la noche me llego otro sobre. Aún no lo e abierto y me da pavor saber que pueda contener—hable bastante nerviosa.

—Ven aquí, no te preocupes por eso. Vamos a pasar un lindo día hoy todos juntos—hablo Justin poniendo la charola con el desayuno a un lado y abriendo sus brazos para que me acomodara en ellos.

Ya se los había dicho pero se los vuelvo a de decir. Me sentía tan protegida junto a el que no quisiera que ese momento acabara. Su perfume llenaba toda mis sofás nasales y me hacía querer mucho más. El latido de su corazón iba a un ritmo perfecto y mi mano recorría su pecho. El bajo la mirada a mis ojos y luego a mis labios. Mis ojos le gritaban bésame y mis labios se abrían inconscientemente esperando.

El volvió a mirar mis ojos en un gesto de aprobación y luego acercó sus labios a los míos. Los rosaba contra los míos y se sentía tan bien un simple rose, que ya imaginaba cómo se sentiría un beso. En el momento en que por fin sus labios iban a estar de lleno en los míos la puerta se abrió haciendo que nos separáramos como si el toque de ambos quemara.

Por la puerta entraron Jazzy y Jaxon muy contentos. Esos niños irradiaban felicidad de tan solo verlos y que decir sobre el hermano. De tan solo pensar en el mi corazón comenzaba a acelerar sus latidos. Lo mire de reojo y el me estaba mirando.

—¿Y que se traen por aquí?—pregunte para que la cosa no estuviera tan tensa.

—¿Ya son novios?—y esa fue mi respuesta.

Una pregunta que hasta yo me la estaba haciendo. No, definitivamente no éramos novios. Y por alguna extraña razón eso me molestaba en el fondo. Mire a Justin esperando que el nos sacara de este embrollo. El me miraba algo divertido y disfrutando de la situación.

—No, no somos novios—hable algo incomoda.

—¿Y porque no? ¿No se gustan?—pregunto Jazzy.

Ok! ¿Como le explicó a unos niños que las cosas no son así de fáciles? Pues no tengo ni idea pero si se que la verdad por más cruel que sea funciona. Mi mirada se dirigió a Justin una vez más buscando ayuda pero el parecía no querer dármela. Así que iba a comenzar hablar y en ese momento Justin decidió hacerlo el.

—Pues Amber si me gusta. No somos novios porque para eso todavía tienen que pasar una serie de cosas y pues aún falta un poco—explicó el lo mejor que pudo.

Le di un pequeño gracias sólo moviendo mis labios. Mire a los niños y aún no parecían muy convencidos.

—¿Pero si van hacer novios verdad?—y dale con la pregunta.

—Jazzy cariño vamos a dejar que el destino decida eso y ya no más preguntas—los mire a ambos.

—Vallan a sus cuartos que vamos a salir. Ahora vamos a prepararlos—hablo Justin muy divertido.

Al parecer a él le hacía mucha diversión todo esto. Pero a mi no. Era incómodo que dos niños se dieran cuenta de algo a lo que yo solo quería mantenerme al margen.

***

Justin nos llevo a un parque para que ellos se entretuvieran un rato. Nosotros nos sentamos en el césped en un lugar donde hubiera sombra. Podía sentir la mirada de Justin en mi pero no quería mirarlo. Sabía que el estaba esperando para hablar sobre lo que casi sucedió en la mañana. Mi corazón iba a mil por hora y el ni si quiera se me había acercado. Yo mantenía la vista fija en los niños que comenzaban a introducirse con los demás.

—Tenemos algo pendiente Amber—hablo Justin algo divertido.

Maldito seas rubio oxigenado.

—¿Sobre que?—muy mala pregunta.

—Esto—al decir eso el estampó sus labios contra los míos.

Sus besos eran delicados y suaves. Estaba teniendo mucho cuidado de no ser brusco. Cuando nos separamos el dio un corto beso en mis labios y sonrió.

—Podría estar besándote toda la vida—me dijo cerquita de mis labios.

—Quisiera ver cómo sería eso—reímos al unísono.

Nunca imaginé que estaría de esta manera con Justin. Siempre me había enfocado en mi trabajo que no me había dado el tiempo de amar y ser amada. Al rato nos pusimos a jugar con los niños. Me gustaba mucho pensar en que algún día podría estar así. Me gustaría casarme, tener hijos y hacer todo lo que hacíamos con los pequeños.

El tiempo pasaba bastante rápido tanto que no supimos en qué momento comenzó a oscurecer. Ya era hora de ir regresando y mañana sería un gran día.

—Es hora de regresar a casa—le hablo Justin a los niños.

Se veía bien, parecía un papá todo responsable y juicioso. Sonreí al ver cómo Justin corría detrás de sus pequeños hermanos. Jazzy vino corriendo a donde me encontraba y rápidamente la agarre escondiéndola del hermano. Por otro lado Jaxon había sido atrapado por su hermano el cual se dirigía en mi dirección. Al llegar donde yo estaba Justin beso mis labios y le sonreí.

Jazzy y Jaxon se miraron y rieron.

***

—Vengan, la comida ya está lista—después de llegar del parque los mande a bañarse.

Cuando todos estuvimos limpios los puse a ver la televisión en lo que yo hacía algo para comer. Los vi a todos entrar al comedor y sentarse en sus lugares. Comenzamos a comer mientras hablábamos de algún tema.

Mientras comíamos me puse a pensar en que éramos Justin y yo ahora. Nos habíamos besado en el parque y no tenía muy clara las cosas.

—¿Verdad que si Amber?—pregunto Jazzy.

Estaba bajo la atenta mirada de Justin, Jazzy y Jaxon. No sabía lo que me preguntaba Jazzy así que arrugue mi frente en forma de confusión.

—Perdón Jazzy. ¿Que dijiste?—pregunte aún con mi frente arrugada.

—¿Podemos ir mañana a ver los animales?—pregunto con una sonrisa.

Los tres me miraban esperando una respuesta.

—Claro que si mi vida. Podemos ir a donde tú quieras—