Prólogo

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I



Hay cosas en la vida que pueden comenzar con una simple conversación, una palabra exacta que desata todo esto a lo que me gusta llamar destino. Para mí el destino, no es simplemente eso a lo que todos conocemos.

Lo veo como un concepto abstracto al cual estamos ligados y que vamos forjando con el tiempo. No importa que hagamos, como seamos y como nos portemos. Nosotros, como humanos tenemos un solo destino seguro.

Vivir, no importa cómo, para luego perecer y volvernos otra partícula flotante en este ancho mundo.

Esta historia que les contare, es una muestra total y rotunda de como el destino funciona. Con sus extrañas tretas, enseñanzas y caminos que cada tanto se cruzan e interconectan para darnos lecciones que nos ayudan a perdonar y crecer.


Como de costumbre, todo esto comienza con una o mejor dicho; dos personas. Viviendo en el bucle tranquilo que los llevara a su destino predestinado. La antesala de un engaño, un corazón roto, las dificultades de la vida moderna... Todo esto, nos llevara a la joven Haneul. La chica que por medio de una llamada, unas cuantas copas y pollo frito de por medio, terminara ebria y con cachetes sonrojados balbuceando en tanto se babeaba encima del hombro de su mejor amigo... Min YoonGi, nuestra primera ficha importante.

¿Ya la visualizaron? ¿Está allí? ¡Perfecto! Hagan silencio entonces, y veamos como ira avanzando la magia de esta historia. Sean atentos, mientras le narro y...


— ¡Estoy harta de los hombres! —Dice Haneul estampando fuertemente contra la mesa, la lata de cerveza que tenía en sus manos.

Su amigo YoonGi, el cual no se encontraba en un mejor estado que ella, se ríe al ver lo alterada que se encontraba su amiga. ¿Era momento propicio para vomitar? Pensó el chico, cuando empujo la cara de su amiga a otro lado. Si no, en ese ritmo terminaría con un pozo de babas en su hombro.

— ¡No te rías idiota!... ¡ESTOY HABLANDO MUY EN SERIO!— Exclamo la chica mientras daba empujones torpes al pelinegro. Tenía mucho dolor oculto en su corazón, pero había aprendido a ocultarlo muy bien.

Aunque claro, amaba recargar energía compartiendo con sus amigos en ese caso, con su hermano del alma: Alias, el tarado con cara de gatito.

YoonGi, se sentía de la misma manera. Claro que sí. Pero hubiera sido más sencillo lidiar con la repentina ebriedad de su amiga de no ser porque Seok Jin, el otro idiota que conformaba su grupo, no hubiera estado tan ocupado con su nuevo trabajo.

— Sólo lo dices porque, Min Ho te termino ayer... Aunque siendo honestos, estoy feliz por ello. Te dije que era un maldito idiota. —Respondió el chico ya riendo bajo los efectos del alcohol y el pollo frito. Sí, ese maldito infeliz llevaría una golpiza cuando lo encontrara.

– No es por eso... B-bueno, sí – Dijo ya arrastrando un poco sus palabras. Corrigiéndose de no decir cosas que a fin de cuentas estaba tratando de guardar para sí misma.

Él la miro de reojo y observo su rostro decaído. Tal vez, estaba siendo un poquito duro con ella... El amor era así y no era quien para juzgarla por estar despechada ese día. ¡Sí, para golpear al imbécil! Pero no para hacerla sentir mal por su malos gustos en los hombres.


Así que ya apiadándose de su mejor amiga. Acaricio su cabeza como consuelo, mientras esta pegaba su frente contra la mesa del lugar donde estaban reunidos.

Haneul era una hermosa chica de cabellos castaños, y ojos color miel. Lograba llamar mucho la atención de los hombres con su físico la mayoría de las veces. Pero siempre los alejaba con su personalidad autoritaria y controladora... No todos llegaban a conocer a la Haneul desalineada y despreocupada.

No, no como YoonGi.

Él mismo sabía lo que ese corazón noble ocultaba, el amor detrás de sus ojos dulces. La inocencia de un alma que no podía ser perturbada por el mundo. Haneul, era la chica que se había dedicado a entender y proteger sobre todas las cosas, así como ella lo hacía con todo el mundo. A pesar, de que para YoonGi, nadie se merecía aquella sonrisa y mucho menos esa extrema bondad.

Mi Querida Min Myeong.  [YOONSEOK]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora