PARTE UNO
Habían pasado ya tantas cosas. Ahora estaba hundido en la depresión de saber que ella ya no lo amaba pero se negaba a creer siquiera que era verdad, tratando de convencerse a sí mismo de que estaba captando mal su distanciamiento y que en realidad le llamaba a gritos por más amor, más cariño, más comprensión, más libertad, más todo... ella era fría, distante, dura y desatenta con él, pero nunca se puso a reflexionar que había sido su culpa, no de ella; él se había encargado de que el amor que sentía hacia su persona se muriera, como las ganas de vivir de ella, la chica de sus sueños, pero él... estaba muy lejos de ser el hombre que estaba buscando y hasta ahora lo entendía, pero aún así no se rendía, seguía ahí, insistiéndole, con la esperanza de que ella dejara de cerrarse ante él, pero ése era su mecanismo de defensa, una defensa para no perder su voluntad, aunque siendo honestos, ésa se había jodido hace meses—Monique...
—¿Qué quieres Marco?
—Que me contestes—se quejó—¿Te importa más tu obsesión que yo?
—No empieces por favor mi amor—le pidió ella arrastrando las dos últimas palabras, ahí estaban otra vez, discutiendo por una estupidez: Marco Sergio y Monique siempre discutían por el hecho de que ella no era la novia ejemplar como él creyó, en realidad la chica era un poco fría, ocupada y obsesiva con ciertas cosas, pero eso era parte de ella pero Marco siempre le dio prioridad a otras cosas, ése fue el problema desde el inicio de su relación: No la aceptó como era, pero ella no le dio importancia... al principio; conforme pasó el tiempo se hizo más impaciente, autoritario, egoísta, inconsciente y déspota... la destruía de poco en poco, disfrazando esa tortura en miel y ternura; a través de las sábanas—Dime, necesito saberlo ya.
—Pero... ¿No lo entiendes? Esa página es parte de mí, pero eso no significa que no te ame...
—No, no entiendo la necesidad de saber cada movimiento, cada evento, el afán de seguirlo a todas partes, no puedo creer que incluso invada nuestro espacio para platicar.
—Mi amor... ya basta.
—No, nada de basta Monique. ¡Está en todos lados! ¿Lo amas más a él que a mí?
—Tom Hiddleston no tiene nada que ver en esto... ni siquiera sabe que estamos discutiendo hoy, ¿Por qué te empeñas en discutir algo que no tiene sentido? ¿¡Por qué?!
–¡Porque eres mía! ¡Muero de celos al pensar que él invade tus pensamientos! ¡Me roba tu amor y lo sabes! ¿Hasta cuándo seguiremos así Monique?
—¡Entiende por Dios! Él está a miles de kilómetros de aquí, no está en este espacio, no me está coqueteando, está muy ocupado en su vida glamurosa de famoso, ¿Hasta cuándo vas a entender tú que solamente es una persona a la que admiro? Nada más. Lo quiero sí, pero lo quiero porque gracias a él sigo aquí, respirando tu mismo aire, sigo viva, pero gracias a que sigo viva me conociste, piensa en eso—las lágrimas caían y caían sin detenerse, sí... la chica había tenido la retorcida idea de suicidarse tiempo atrás pero por azares del destino, la presencia de Tom en su vida le impidió hacerlo; no podía hablar, estaba tan molesta con el hombre que estaba frente a ella que las palabras no salían de su boca... ¿Y él? Pensaba que no tenía nada que decirle, cuando en realidad quería gritarle a la maldita cara tantas cosas.
—No tengo nada que pensar. ¿Quieres morir? Perfecto, nos morimos los dos no te preocupes, las pastillas funcionan—Marco tenía sus ojos clavados en la chica de 20 años, su pensamiento se retorcía cada vez más, si morir era la solución para que dejara de recriminarle que gracias a un británico estaba con él, entonces eso haría: concederle la chance de morir.
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One Shots VARIOS.
Short StorySí, estás en lo correcto. Estos One Shots no serán de un sólo protagonista, sino varios personajes, esto se hace con el objetivo de no sólo "encasillarse" en un sólo artista, grupo, actor o película, tendrás gran variedad de tramas por leer, desd...