La secuela de Franz of Pleasure.
¿Creías que esta historia había terminado? ¡Por supuesto que no!
Manuela Gernedel cree que puede recuperar algo perdiendo algo del mismo valor. Dispuesta a renovar su vida, deja a su hijo en manos de Elinor, una muj...
Detesto cuando Elinor se pone a sermonear. Todo lo dice como si fuera el claro ejemplo de la pureza y lo peor de todo es que la gente lo cree.
¿Por qué tiene que interrumpir cuándo estoy con Nick? Fue una velada maravillosa. En fin...
En apariencia seguiré los consejos de Elinor, le mandaré fotos de mi vestimenta para que se calme.
«-Hey Eli. ¿Crees que esto es adecuado para esta noche? -Te ves linda. Tiene muchos años que no te ponías esa blusa holgada y ese pantalón roto. ¿Por qué lo preguntas? -Quiero verme linda sin opacar a Manuela. -Ay no por favor... -¡Oye! Desapruebas todo lo que hago. ¿Quién te crees? ¿Mis padres? -Mira Sarita, por mí te puedes vestir como se te dé la gana, al fin y al cabo es tu vida. Pero no se te ocurra estar cerca de Manuela. Hazlo por la rata inmunda, ¿sí? -Ash, se llama Nicholas. ¿De acuerdo? -Como sea, mantente alejada de Nick y Manuela. Fin del comunicado.»
Elinor.
Ay Sarita, solo ruego porque no seas imprudente. Jamás había cortado una llamada molesta con Sarah, quizás fui un poco ruda y debería disculparme. Decidí por mandarle un mensaje.
«Sarah, lamento haber cortado la llamada de esa forma. Es solo que me preocupas y no quiero que te pase algo malo.»
Sarah.
Leí su mensaje y respondí.
«Agradezco tu preocupación, pero ya no soy una niña para que me digas que hacer. Ni siquiera eres mi madre.»
No me importa lo que piensen Elinor y los demás, tarde o temprano conocería a Manuela y quizás la podría enfrentar. Yo significo mucho más para Nick que ella.
Manuela.
Pasé una tarde entera un poco extraña. Por primera vez en muchos años estuve sola, caminando por las calles y haciendo compras para mí.
La gente dice que dedicarse tiempo a sí mismo trae beneficios y te hace sentir mejor, pero ¿por qué yo no me sentí así? Al contrario, fue como si me convirtiera en alguien más insegura y vulnerable.
Leí un mensaje de Elinor acompañado de un collage:
«Hola Manuela. Debo decirte que Vitto y yo nos hemos vuelto muy cercanos. Jamás creí tener tantas cosas en común con un niño de casi cuatro años. Él te extraña mucho, pero cada día es más fuerte e independiente porque quiere protegerte. Él percibe lo vulnerable que estás y te sientes. Quizás no te conozca mucho, pero agradezco la confianza que has depositado en mí. Quiero que sepas que conmigo tienes una amiga que tratará de apoyarte en lo que esté a su alcance. Vitto y yo quisimos tener un detalle contigo porque te queremos muchísimo por la persona que eres. Esperamos dártelo cuando vuelvas.
P.D: Nos la pasamos casi todo el día haciendo esto en mi oficina. Vitto tomó la foto y fue a la primera. Increíble, ¿no?
Con amor, Vitto y Elinor.»
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