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-Chan, tengo una sorpresa para ti.-BaekHyun entró en el dormitorio, donde ChanYeol descansaba. El mayor tenía una sonrisa dibujada el el rostro que daba miedo.

-¿A sí? ¿Y qué es?

BaekHyun gateó hasta su marido para coger de los laterales sus calzoncillos, retirándolos de golpe.

-¡BaekHyun! ¿Qué haces?

Éste no respondió, sólo le colocó otros pantalones. El alto los miró y se dio cuenta de que era su bañador.

-No te emociones, Park. Ahora no.

-¿Entonces qué haremos?

-Haber, piensa un poco. ¿Para qué sirve un bañador?

-Para bañarse.

-Perfecto.

-¿A dónde?

-He conseguido...Bueno, no te lo digo que es una sorpresa. Sólo tápate...

El bajito le tapó los ojos con una venda roja, mientras el alto sonreía.

-Yo conduzco.

-Ok.

Le guió hacia el coche. Cuando se aseguró que ChanYeol estaba bien atado, se ató él y fueron hasta una piscina vacía.

-Huele a piscina. 

-Exacto, una piscina.-Se puso detrás del alto y le quitó la venda de los ojos. El menor pestañeó unas cuantas veces, no acostumbrado a la luz del sol. Cuándo ya se acostumbró, observó que delante de ellos se encontraba una piscina grande completamente vacía.

-¿Y esto?-Preguntó girándose hacia su marido.

-He conseguido que nos dejen la piscina para nosotros solos. Te dije que me encargaría personalmente de tener un día sin interrupciones. Y esta tarde ya sabes.

-¿Pero cóm...

-No preguntes y disfruta.

BaekHyun se asomó por la orilla de la piscina y se quitó la camiseta. Iba a meter un pie, pero fue empujado al agua.

-¡Aaaahhhh! ¡Está muy fría!

-¿Sí?

-¡Me cago en ti, Park ChanYeol!

Entonces el otro se tiró, salpicando media piscina fuera del agua.

-Si puede ser no tires el agua fuera.

-No es mi culpa ser tan alto.

El mayor se rió y nadó hacia su marido, dándole un beso.

-Yeol.

-¿Mm?

-Te reto a una carrera.

-Ya estás tardando.

Salió nadando hacia la parte contraria de la piscina.

-¡No seas tramposo!

-¡En la guerra y en el amor todo vale!

El bajo empezó a nadar lo más rápido que pudo hacia donde iba su marido, pero no lo alcanzó. El alto ya estaba esperando apoyado en el borde mientras veía divertido a su pareja, que nadaba como si la vida le fuera en ello.

-¿Qué Byun? ¿Cansado?

-Re-revancha.

-Ok, pero te doy ventaja.

BaekHyun empezó a nadar antes que ChanYeol, y después de diez segundos, empezó el alto a nadar. Pero, obviamente, ChanYeol llegó antes que BaekHyun.

-No es justo. Tú tienes la extremidades más largas.

-Oh, qué pena. Mira como lloro.

El mayor se metió en el agua y buceó hasta el centro de la piscina. Su silueta era difícil de ver, por eso ChanYeol no vio cuando BaekHyun se puso debajo de él y tiró de sus pies, hundiéndole hacia abajo mientras con sus piernas rodeaba su cintura y con sus brazos su cuello, besándolo. El alto le cogió de la cintura con sus manos, besando sus labios más profundamente. Ninguno quería acabar, pero necesitaban aire.

Definitivamente tenían que disfrutar. Y ChanYeol sabía que esa tarde, cuando llegaran a casa, iban a disfrutar mucho más. 

maridos torpes, inocentes y adorables // cbDonde viven las historias. Descúbrelo ahora