Capítulo 4.

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Viktor POV.

Mi mano se movía por sí sola. Sentía como mis ojos abiertos de par en par se hacían uno junto a la locura y a una extraña sensación de felicidad, que con cada pestañeo disfrutaban más de la escena tan macabra provocada sin ningún pudor.

El amanecer daba las primeras señales filtrándose por las rendijas de mi ventana. Podía percibir el olor a tierra mojada esparciéndose en la sala, fusionado con el aroma tan embriagador de la sangre recién sacada del cuerpo frente a mí. Aún me cuesta comprender cómo fue que llegué a tal punto, pero tampoco es como si me importase mucho. Al fin y al cabo, no me arrepiento de nada.

Suelto una estridente risa al imaginar a uno de los familiares de mi actual víctima. Su ceño fruncido a más no poder, de respiración agitada; manos sudorosas intentando procesar las imágenes. Algo digno de una foto sin dudar.

No, no siento lástima. Jamás pediría perdón por mis actuares; nunca. Y que antes mi adorado diablo me mate si alguna vez lo considero correcto.

Nieve Negra [Viktuuri]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora