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Mi madre, mi abuelo y mis tres vecinos estaban escuchando atentamente las profesionales palabras del médico. Cuando este se fue, pude ver a mi madre caminar completamente enojada de un lado a otro de la habitación, mi abuelo estaba hablando por celular y mis vecinos sentados en el sofá. Cuando Andy se dio cuenta de que había despertado, se acercó a la cama y me sonrió. Yo miré a mi madre quien al verme despierta comenzó a llorar, yo por mi parte también sentí esas ganas enormes de querer llorar. Me arrodillé en la cama frente a Andy y lo abracé, comencé a llorar desconsoladamente en su hombro y el solo me abrazó dejándome desahogar. Mi madre y mi abuelo salieron de la habitación luego de darme un abrazo y asegurarse que me encontraba perfectamente. Cuando ya me había calmado un poco me volví a meter en la cama y todos se acercaron a mí. Andy puso su mano sobre mi cabeza y luego la bajó a mi mejilla, cuando fijé la vista en su rostro él me sonrió.

–Me tocas con demasiada confianza. Primero la cintura y ahora la mejilla. ¿No te dejó claro mi padre que a un Schneider no se le toca tan confiadamente?

–Ya déjate de tonterías. Solo siento tranquilidad al tocarte, hace solo cinco minutos parecías muerta en vida. Solo estoy confirmando que tu cuerpo sigue siendo cálido.

–Gracias a los tres por haberme ayudado otra vez.

–¿Por qué me cubriste del golpe?

–Eres actor. Me pesaría la conciencia si llevas un golpe en la cara por mi culpa. Además... lo de hace un rato no tiene nada que ver contigo, así que no podía permitir que salieras lastimado.

–Eres una tonta. Casi me muero de miedo y preocupación cuando caíste inconsciente y sangrando. Tú padre es un maldito desquiciado.

–Lo siento.

–Así que eres hija de el gran empresario Max Schneider y la talentosa y famosa modista Elena Aston. Nieta del famoso Arquitecto Bruno Aston, dueño de la más famosa cadena de hoteles cinco estrellas Paris Aston... ¿Algún otro pariente increíble?

–Soy nieta de la increíble arquitecta Mia Stamford, anterior presidenta de Stamford Corp. Y quien hizo que mi abuelo se enamorara de la arquitectura y que tomara posesión de la empresa una vez que ella falleció. También soy nieta de Cristian Schneider y Tamara Hell, anteriores presidente y vicepresidente de la exportadora nacional "Schneider Company". Soy la hermana mayor de la famosa pianista Leyla Schneider y yo mismas soy una violinista con bastante prestigio y alabada por mi increíble inteligencia. O al menos eso es lo que piensan, no saben que detrás de mi inteligencia hay horas e incluso años de constante esfuerzo y estudio.

–Tienes una familia que resalta demasiado.

–Creo que te oí decir que no conocías a mi padre.

–Solo estaba lastimando su ego. Así que eres la violinista Mey Schneider.

–Desgraciadamente. Ya conoces la maldición de llevar ese apellido. ¿Has escuchado hablar de mí?

–Claro. Siempre que he escuchado hablar de ti te asocio a alguien inteligente, con talento y hermosa. Los directores de cine te mencionan con regularidad por ser intérprete solista de las más increíbles, hermosas y emotivas ambientaciones de música para las películas.

–Esa es la cara con la que me ven las personas. Ya conociste accidentalmente a mi yo habitual.

–Ya me parecía que la chica del día del rodaje y la que me encontré llorando fuera de casa eran diferentes.

–Estando con Leyla debo ser como mi padre quiere que sea. Arrogante y orgullosa.

–¿Esa chica que estaba con tu padre era Leyla?

Profundos y Bellos ojos azulesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora