El supremo de un conjunto es la mínima cota superior del mismo.
Existen muchas formas de lidiar con los problemas según todos los estúpidos libros de auto-ayuda. Pero la mayoría no mencionan el método más efectivo, aguantarse.
La vida le enseñó esta útil herramienta a Seungkwan con base en malas experiencias.
Si has hecho el ridículo en público, si gastaste el dinero del almuerzo en una estupidez y ahora tienes hambre. Aguántate. Si no ahorraste lo suficiente para el viaje al que querías ir; cuando debes admitir tus errores. Aguántate.
Aquello que vale la pena merece extrema paciencia y un gran aguante.
La resistencia es la clave para poder superar su aversión por Chwe Hansol, Seungkwan lo sabe. Porque un gusanito molesto dentro de su pecho le grita que el azabache vale la pena.
Es así como los días dejan de ser nublados —no literalmente, porque es primavera, las nubes son casi un mito— y el constante reflujo causado por la gastritis deja de atacar a Seungkwan por las noches.
Cuando uno reconoce sus problemas es más fácil avanzar.
Como Seungkwan reconoce su problema —Hansol—, convivir es más fácil.
Se piensa entonces, que las cosas no pueden ir de mejor manera entre ellos dos. Y para Seungkwan es así, en teoría. Pero para Hansol...
— Seungkwan, vamos a los bolos.
— Claro.
— Mejor a los Go Cars.
— De acuerdo.
— ¡O saltemos en paracaídas!
— Sí, por qué no.
Hansol bufa y deja la cabeza caer sobre la mesa de la cafetería. Sus amigos le miran confundidos.
— Entonces —habla Seungcheol—, ¿tu problemas es que es... amable contigo?
— No. Es decir, tiene una pierna enyesada, ¡ni siquiera podría hacer paracaidismo! —Responde Hansol.
— Creo que entiendo lo que nos trata de decir —Soonyoung sonríe—. Cree que Seungkwan lo está ignorando y que ya no lo necesita. El pequeño sólo necesita un poco de atención.
Los presentes en la mesa ríen bajito y el menor de todos se ruboriza un poco.
— ¡Claro que no! —Rueda los ojos—. Simplemente se comporta diferente. Y no me gusta.
— ¿Y se lo dijiste ya? —Cuestiona Wonwoo, llevándose un bocado de comida a los labios.
Hansol se relame los labios con culpabilidad.
— No esperes que el chico te lea la mente. Si algo te no te agrada, dilo.
— Sería algo... raro.
— Pues no entiendo cómo funciona su relación, pero te aseguro que no es la más normal que conozca —interviene Mingyu—. Dilo, no pierdes nada intentando.
[...]
Seungkwan termina de guardar sus cosas y carga su bolso a sus espaldas, tomando las muletas junto a su lugar.
— ¿Salvaste al mundo en otra vida? —Le pregunta una chica de su clase, mirando por la puerta del salón—. Dime qué demonios hiciste para que ese chico se desviva por ti.
Seungkwan rueda los ojos y camina a la salida ignorando al club de fans de Hansol que se ha formado entre algunas chicas de su propio salón.
— Lo lleva a casa, le carga el bolso y espera por él en la biblioteca —comenta otra, con un tono ensoñado para repentinamente fruncir el ceño—. Y Seungkwan lo trata peor que un perro.
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Pierna Rota. [VerKwan]
Fanfiction¿Cuál es la probabilidad de caer de las escaleras? "¡¿Estás bien?!" Seventeen | Principal Verkwan | Secundarias: ? Para Salma; ámame, maldita.