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Muchos creen que el mundo de los millonarios y/o de los que tienen mucho dinero es maravillosa y todo es color de rosa. Pero déjenme decirles que no es así.

Apenas tenía 9 años cuando conocí a SeokJin un pequeño niño de pueblo, pero mi padre el rey de este reino. Me dijo que no era bueno que las princesas se juntarán con niños del pueblo.

Como yo era pequeña deje de salir al pueblo y me quedaba en la habitación de mi hermano mayor Park Jimin. El me cuidaba y me consentía, un día estábamos sentados en su gran cama mirando todos los regalos que nuestro padre nos había dado.

-Jiminie quiero salir al pueblo.-

-Pequeña sabes que no podemos salir,  nuestro padre nos matará si salimos.-

-Quiero ir a ver a mi amigo Jin, el es muy bueno conmigo.-

-Pero papá no nos deja, es mejor estar dentro del castillo, no queremos que papá se enoje.-

-No Jiminie.-

Le deje de insistir y subí a mi alcoba, al tener 9 años era muy inocente. Pero conforme a los años deje de serlo, ya no era la pequeña niña que todos chantajeaban; la humildad y la bondad aún seguían en mi. Pero ya no queria estar encerrada en este castillo.

Quería salir y saludar a todos en el pueblo, pero mi padre no me dejaba salir a mi, ni a mi hermano. Nos quedábamos día a día encerrados en este castillo recibiendo regalos de nuestro padre, quien nos mandaba lo ultimo que estaba de moda.

Pero no queria nada de eso, yo quería salir y ver como ha crecido el pueblo y Kim SeokJin aún no lo olvido. Recuerdo todo de el y como era tan bueno conmigo, quisiera salir volver a verlo, solo escuche por las cocineras que Jin se había vuelto el dueño de la mejor panadería y pastelería de todo el reino.

Así que papá no tardaría en contratarlo para que trabaje aquí en el castillo.  

Color De Rosa  ❥Jin y TuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora