La Heredera

Capitulo 8: Perfumes

— Esta noche es la cena de bienvenida, allí podrán conocerse mejor, mientras tanto yo le mostrare a Karlie las instalaciones, su casillero y su habitación junto con sus horarios de clase, la reina y el archiduque tienen cosas que hacer, y Nicolas también así que los dejamos — dijo la directora Privet con seguridad cuando salimos de su oficina. Nosotras tomamos nuestro camino subiendo por las impresionantes escaleras de la derecha.

— Bienvenida a la Academia Real Karlie, verás, la Academia fue fundada con la idea de inculcarles a los jóvenes carácter y confianza, y los ha preparado para la realeza desde tiempos muy remotos — decía mientras yo observaba lo que había a mi alrededor, los ventanales iban del piso al techo lo que daba una mejor vista al jardín delantero, sin darme cuenta llegamos a una biblioteca enorme.

— Wow, esto es asombroso — le digo mirando la gran cantidad de libros que hay— a Jossette le encantaría ver todo esto.

—¿Jossette? — pregunta la directora mientras caminamos por la biblioteca.

—Mi hermana menor, a ella le encantan los libros — le dijo mientras paso mis dedos por algunos de los estantes.

— No sabía que la Infanta Leonor tuvo otra hija — me dijo viéndome desconcertada.

— No, Jossette es hija de mi padre y mi madrastra, ella no tiene nada que ver con... ¿Todo esto? — le explico a la directora.

— Ya veo, no sabía que viviste en la otra dimensión, supuse que ya sabias de todo esto desde hace años — me dijo desconcertada — solo el veintisiete por ciento de los jóvenes logran graduarse y eso que la mayoría ya han tenido contacto con este mundo ¿crees que lo lograras? — me pregunta viéndome a los ojos.

— Si lo creo y haré todo lo posible — le digo con seguridad, me gustan los retos y mi Alina me enseño que debo superarlos así me tenga que caer muchas veces.

— Eso espero Karlie, notaras que todos los estudiantes de comportan con dignidad y sofisticación — me dijo mientras cruzábamos la biblioteca hasta llegar a una gran entrada en forma de arco que llevaba a un pasillo.

— ¡Ah! ¡Hoy llega la princesa de Ávalon! ¡Significa que es día de la presentación y hay que vestir como damas! — chilló una chica que estaba hablándole a su amiga en el momento en que pasamos por el lado de ellas.

— Shh, Señoritas — le dijo la directora a modo de regaño y ellas se fueron caminando mientras seguían hablando en voz más baja — esta es la original Academia Real: el castillo ancestral, muchos salones y los dormitorios están en la nueva sección — prosiguió.

Entonces cruzamos la entrada y pude apreciar una fantasía arquitectónica, todo era de vidrio, acero y piedra blanca con grandes ventanales acristalados que iban del piso al techo en la parte derecha dejaba ver un inmenso jardín con muchas fuentes que estaba rodeado de árboles y una gran cancha donde había estudiantes levitando. Al lado de la izquierda a través de los ventanales se veían los salones los cuales eran inmensos y al lado sus respectivas puertas de vidrio para entrar.

— Nuestras bellas instalaciones incluyen un vanguardista salón digital — dijo mostrándome uno en el cual cabían al menos doscientas personas cómodamente, en este estaban solo mujeres eran unas veinte solamente y estaban sentadas en unas mesas en forma de media luna cada una con una laptop de último modelo — Aquí encontraras el salón de baile olímpico — dijo cuándo avanzamos hasta el salón de al lado el cual era de mayor tamaño del anterior y en este habían unas quince parejas bailando lo que parecía era un vals — y mi lugar favorito, nuestro lujoso spa — dijo con una sonrisa señalándome unas grandes puertas de vidrio aquí si ya no habían ventanas para poder ver lo cual no se me hizo extraño — los hombres siguen siendo hombres, este spa es únicamente para las señoritas — añadió con una sonrisa, seguimos viendo salones hasta llegar al final del pasillo, así volteamos a la derecha, cada vez aparecían más salones iguales que los anteriores hacia el lado derecho pero al lado izquierdo ya estaban los casilleros los cuales estaban separados en grupos de cinco y median unos dos metros de altura, estos estaban intercalados con dos colores los de las mujeres eran de cristal color rosa pálido y los de los hombres eran de color azul claro también de cristal. Entonces la directora me mostró el mío el cual estaba a mitad del pasillo y tenía los mismos símbolos que mi marca de nacimiento grabados en oro en la parte de arriba, noté que todos los casilleros tenían símbolos diferentes también grabados en oro.