Youngjae juraría que nunca se había sentido tan nervioso en su vida. ¡Iría al cine con Jaebum! Y con sus amigos también, pero... ¡Jaebum! Es de él de quien se trata. No puede estar tranquilo sabiendo eso, nadie lo haría.Habían acordado que irían un sábado en la tarde. Y ya era sábado, lo que significaba un Youngjae nervioso mirándose en un espejo cada cinco minutos, procurando estar presentable. Aún faltaba media hora para que Jackson fuera a buscarlo a su casa, mientras que Bambam iría con Jaebum y Yugyeom, ya que no conocían el lugar al cual tenía pensado ir el peliblanco. Ni siquiera él lo sabe, y se trataba de un centro comercial.
Escuchó el timbre sonar repetidas veces y luego a su tío, quien vive con su familia, gritando que su amigo estaba en la entrada. Era un alivio que no se encontrara su madre; hubieran tardado media hora en llegar, porque seguramente regañaria a Jackson por tocar de ese modo. Siempre lo hacía.
–¡Youngjae! –gritó Jackson desde el recibidor– ¡Espero que estés listo, porque te llevaré aun así tengas una almohada pegada al rostro!
–Podrías haber esperado al menos cinco minutos para comenzar a gritar.
–¡No, no se puede, no hay, no existe!
–Deberías superar eso, Jackson –Youngjae rió saliendo de su casa.
–¡Adiós, tío de Youngjae! ¡nos vemos!
–¿Por qué gritas? Lo tienes al lado.
–Es para que le llegue bien el saludo y la buena vibra –realizó el signo de paz con sus manos, mientras que el menor sólo se limitó a reír, saludando a su tío quien reía con una sonrisa brillante.
El viaje en auto no fue nada silencioso o normal. Jackson encendió la radio y cantó y rapeó cualquier tema que sonaba. Youngjae sólo reía en su lugar hasta que se escuchó la voz de Bruno Mars y no se resistió. Just the way you are resonaba en cada rincón del auto del mayor. Sólo se escuchaba la voz de Youngjae acompañando el tema, seguida por agudos gritos provenientes de Jackson simulando ser una fan enloquecida a la que no le importaba que su ídolo no pronunciara tan bien el inglés.
Al cabo de unos minutos, habían llegado con los demás al lugar de encuentro. Youngjae suspiró aliviado al llegar junto a Bambam.
–¿Por qué tardaron tanto? –preguntó el peliblanco en tono molesto.
En ese momento, Jackson le dirigió a Youngjae una mirada cómplice indicándole que mantuviera silencio, pues, debido a su total concentración en la música que emitía la radio, el mayor se desvió del camino logrando perderse. No quería que Bambam lo supiera; de seguro lo retendría un buen rato dándole un sermón por ser tan descuidado.
–Lo siento, Bam. Mi madre comenzó a hablarnos sobre la juventud y lo que ella hacia en la suya, ya sabes como es –comentó Jae con una sonrisa que delataba su mentira.
–Ya no importa –miró a sus espaldas–. Jaebum y Yugyeom fueron a comprar algunas cosas, deben estar por regresar...
* * *
A pesar de estar un poco molesto, eso era lo que menos se notaba en Youngjae. El miedo y nerviosismo estaban un paso adelante. Creyó que bromeaban cuando le dijeron que película verían; sus amigos tenían bien claro que las películas de terror no le gustaban nada. Y aún así, en ese momento se encuentra sentado en la zona del centro dentro de una sala de cine esperando el comienzo de una película del género que siempre intenta evitar.
Por otro lado su amigo castaño miraba hacia la gran pantalla rígido, probablemente intentando parecer calmado. Otra razón que hizo molestar un poco a Jae; ni él ni sus dos amigos soportaban esas películas. ¿Qué pasó por la cabeza de Bambam al elegirla? ¡Que tontería!
Agh, Kunpimook Bhobokul. Esto sí que no lo dejo pasar.
Sus ojos recorrían cada rincón de la sala en su campo de visión. Estaba nervioso no sólo por la película, sino también porque Jaebum se encontraba sentado a su lado; y para colmo, del otro lado se hallaba Yugyeom con expresión algo desinteresada. No tenía a ninguno de sus amigos cerca para abrazar. Respiró profundo. Las luces se apagaron dejando la sala completamente a oscuras. Youngjae aferró sus manos a los costados de su asiento donde deberían estar las bebidas. Cerró sus ojos. No quería hacer un escándalo al gritar en alguna escena, de esas típicas que te hacen saltar del susto. Sería realmente vergonzoso; y, si llegase a pasar, seguramente saldría corriendo de ese lugar. La pantalla se encendió nuevamente mostrando unas cuantas publicidades antes del comienzo de la película. Seguía respirando profundamente hasta que sintió algo frío apoyarse sobre su mano derecha, lo que hizo que se alarmara. Al abrir sus ojos giró su cabeza, viendo a Jaebum observarlo fijamente mientras sostenía su bebida unos pocos centímetros por encima de su mano, la cual tapaba el orificio donde debería ir el vaso.
–Hmm, ¿estás bien? –preguntó el mayor. Tan frío como su bebida.
Youngjae sólo asintió y bajó su cabeza al ver que Jaebum aún lo observaba con expresión seria.
–¿Quieres un poco de gaseosa? –le ofreció– ¿jugo, agua? Puedo ir a comprarte algo, lo que sea, sólo dime.
¿Qué es esto? Es tan cálido y desconocido.
Youngjae no supo que decir. Se quedó sin palabras, no conocía a ese Jaebum. Tan preocupado por alguien que no fuera él o Yugyeom.
* * *
Tal vez pudo haber exagerado un poco, o tal vez no. Youngjae no reaccionaba y eso estaba comenzando a inquietarlo. ¿Y si no se sentía bien? Si se llegara a desmayar ahí mismo, ¿qué haría? Se veía tan pálido.
–¿Seguro que estás bien? –volvió a preguntar.
El menor pareció volver a la tierra y asintió nuevamente.
–Si, yo... –alguien delante suyo lo hizo callar. La película había comenzado–. Estoy bien –susurró.
Jaebum apretó sus labios dando a entender que no estaba muy convencido con esa respuesta.
En el transcurso de la película notó a Youngjae algo inquieto. Las escenas importantes se estaban haciendo presente e intentó centrarse en la pantalla pero no pudo. Mucho menos cuando Youngjae dio un grito asustado debido a una de esas escenas. Algunas personas lo callaron molestas, otras simplemente rieron, como sus amigos, y Jaebum... él solo tomó al menor por su muñeca y lo sacó de la sala. No le importaba perderse la mitad de la película, al fin y al cabo no le había puesto atención desde el principio.
Con las luces de los pasillos el rostro del menor se veía más claro. Ahí es cuando notó que estaba totalmente rojo. Debe estar muy avergonzado por lo sucedido.
Era buen momento para poner en marcha el plan que jamás confirmó, pero aún así era una opción. Para enamorar a una persona lo principal es conocerse; por lo tanto, eso es lo que intentará aprovechando que están sólo ellos. Conocería a Youngjae más a fondo.
* * *
7u7
¡Estoy de vuelta! :D?
Este capítulo es más que nada para compensar el no haber actualizado en mucho tiempo 7u7r
Puede que la historia no avance mucho pero esto es como una puerta a lo bueno.
Haré todo lo posible para que sea de su agrado. ¡No me abandonen, se los pido! uwu
Gracias por leer, sepan que los adoro y... Saludos 👀✌
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Inevitable. [2Jae]
FanfictionJaebum, un joven de dieciocho años de edad, estando en su último año en la secundaria superior, al conocer a un chico un año menor que él, comienza a sentir extraños sentimientos que nunca antes había sentido y otros que simplemente quería olvidar. ...