Minho.
Días después de mi última discusión, he tenido dolores horrendos de cabeza por forzarme a recordar muchas cosas. SungHoon no ayudaba en nada, más bien me parecía un estorbo en muchos sentidos.
Él había salido, me había mencionado que necesitaba ver unas cosas importantes, ¿En serio? ¿Cosas importantes en medio de un puto bosque? O eso creo yo, ya que no he pisado la entrada de la cueva.
Me senté al fondo de esta, apoyando mi espalda semidesnuda en la fría y un poco húmeda piedra, cerré los ojos y en cuestión de minutos caí en los brazos de Morfeo.
》Era un bonito pueblo; yo me encaminaba sin rumbo alguno en los andares de aquel lugar.
Habían pequeñas tienditas campesinas, vendiendo frutas, carne y otros víveres para la gente.
Todo se me hacía conocido.
Entonces esa risa me puso en mis máximos sentidos.
Volteé y vi a una chica joven dándome la espalda, riendo con un chico moreno con el rostro borroso. Ambos parecían energéticos hablando, hasta que un hombre con una capa roja se les acercó. Ella parecía ser una princesa... y él un rey.
Los tres se encaminaron en lo que ahora yo distinguí como un castillo color blanco.
Mierda, todo eso me dejaba un sabor amargo en la boca.
-¿M... Minho?-Una dulce y masculina voz habló a mi espalda.
Quise voltear, pero todo se volvió negro y el ruido del pueblo desvaneció. 》
-Minho.. Minho ¡Despierta!- SungHoon me sacudía del hombro.
Abrí los ojos, encontrándome con SungHoon.
-Ah.. ¿qué?- Pregunté.
-Traje comida.- SungHoon mostró una mochila demasiado vieja y dentro de ella habían frutas, carne y botellas de agua.
Qué coincidencia.
-¿De dónde sacaste eso?- Pregunté de lo más normal, ocultando mi desesperación.
SungHoon sólo se encogió de hombros, mordiendo una manzana y sentándose frente a mi.
-Por ahí.- Dijo finalmente.
Gruñí alejando mi mirada de él furiosamente.
-Soñé que estaba en un pueblo.- Solté finalmente, tomando un pedazo de carne de la mochila y comenzar a comerlo.
-¿Ah sí? ¿Y cómo era?- Preguntó despreocupado SungHoon mientras masticaba, Con la vista en su manzana.
Levanté los hombros.
-Era un lugar tranquilo y demasiado viejo, habían puestos de frutas..- Miré la manzana de él.-..Carne..- Sacudí el papel dónde venía envuelto el ya mencionado.- Y otros víveres.
SungHoon comenzó a comer rápidamente.
-¿Y qué más?- Preguntó nervioso.
Fingí no notar el estado de presión de aquél hombre.
-Vi a una jovencita de espal..
SungHoon comenzó a atragantarse, exageradamente.
-Ah.. bendita mierda, maldita semilla..- Dijo lanzando el hueso de la manzana lejos.- Perdón por interrumpirte, comer rápido me vuelve idiota ¿Cómo era la jovencita en tu sueño?- Dijo SungHoon evitando mi mirada.
Fruncí el ceño extrañado y continué hablando.
-Era muy blanca, delgada, su cabello negro demasiado largo, llevaba una corona dorada en su cabeza, no vi nada más porque estaba de espaldas.. pero lo que me tiene mal es que... tenía esa risa que he estado oyendo siempre.
SungHoon miraba la pared de la cueva como si esta tuviera la respuesta a su momento en aprietos.
-Los sueños pueden jugar con tu mente.- Dijo finalmente, tomando un trozo de carne.
-Se veía tan real, SungHoon, ya me estoy hartando de estar encerrado aquí desde hace dos años.- Me quejé.- Después no te alarmes cuando no me encuentres aquí.
SungHoon me fulminó, sus ojos se volvieron en ese conocido dorado brillante. Estaba furioso.
-Escúchame bien, Minho, tú de esta maldita cueva no sales hasta que yo te dé la autorización, salir en plena luz del sol puede dañarte más la memoria, es temporal lo tuyo, pronto pasará.- Dijo amargamente.
Gruñí, hasta que mi cabeza comenzó a doler tan mal.
-Ahg..- Las palmas de mis manos estaban en mis sienes y mis piernas se doblegaron.
SungHoon me miró extrañado hasta que cayó en cuenta de lo que me pasaba.
-Joder, justo en la hora del almuerzo.- Se quejó saltando hasta quedar de pie y se encaminó a mi.
《 Extráñame 》
Esa palabra con mi voz golpeó fuertemente mi cabeza antes de que el dolor se vaya por arte de magia. Se repetía como eco en mi cabeza, ¿Cuándo yo dije eso? Lo más inquietante de todo..
¿A quién se lo dije?
-Extráñame..- Repetí en voz baja mirando hacia la nada.
-¿Por qué debería extrañarte? Ese dolor no te está haciendo enamorarte de mí ¿verdad?- Dijo SungHoon alarmado.
-¡No seas imbécil! ¡No!- Le lancé una piedrilla.- Yo le dije "Extráñame" a alguien..
SungHoon me miró atento.
-No recuerdas nada.. ¿verdad?- Me preguntó con cierta compasión.
Odiaba que me tuviera compasión, quería odiarlo por no decirme nada.
Suspiré finalmente y negué.
-Sólo aquella risa y lo de ahora.
SungHoon se quedó pensativo.
-Sólo te recordaré algo.- Se puso de pie, tomando la mochila con la comida y cerrarla bien para que ningún roedor quiera robarla.
El brillo en mis ojos no tardó en aparecer, al fin tendría un recuerdo.
-Sería de mucha ayuda.
SungHoon me daba la espalda, pero sabía que le estaba costando un testículo decírme.
-Tú tienes un gran amigo, es como tu hermano..- Suspiró.- Creció contigo y entrenaban juntos... él estuvo contigo antes de que mueras.
Tragué saliva, sintiendo tan familiar al chico que me describía SungHoon.
-¿Y de qué morí?
SungHoon negó rápidamente.
-Eso tú solo lo vas a recordar con el tiempo.
Tenía otra pregunta y sin duda no me la iba a tragar.
-¿Estuve casado?- Pregunté.
Los músculos de SungHoon se tensaron notoriamente.
-No lo sé, Minho.. no lo sé.
Bajé la mirada, tratando de recordar algo.
Pero nada venía a mi.
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Im back ,regresé de una pesada semana de exámenes y sin celular .
¿Saben que doloroso es eso? ;-;
Planeo escribir durante mi semanita de vacaciones.
Con respecto al capítulo, ¿por qué SungHoon le oculta la verdad a Minho? ¿Hay alguna razón ?
¿Que pasó con Kibum estos 2 años de la supuesta muerte de Minho?
Las amo por ser tan pacientes y por soportar a esta chica que les quiere dar mucho material minkey ❤
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Bloody Rose #3
FanfictionNo puedo recordarte...Lo siento mucho. Fueron aquellas palabras sin saber, destrozaron el corazón de su rosa ,él ha perdido la memoria temporalmente desde que el Cazador Oscuro lo revivió de su muerte , las preguntas de Minho invaden tanto su cabeza...