Se busca sirviente ( billdip) #PremiosBillDip2017

El chico nuevo (Parte 4/5 Maratón)

 Después de la ejecución todos fueron dejados en libertad de escoger que hacer el resto del día, Bill decidió estar con Dipper, Pacífica con Mabel mientras que Phil seguía procesando todo lo que acababa de suceder.

El pelirrojo siempre había sido solitario, eran muy pocas las personas que llegaban a conocerlo de manera completa. Era callado e inclusive amable con aquellos a quien les tenía aprecio, pero cuando estaba solo en una habitación, con la oscuridad en ella, se dirigía a un rincón de esta y allí abrazando sus piernas las lágrimas acudían a sus ojos escarlata. Durante sus ratos solos siempre se preguntaba "¿Que es lo que me falta?" hubo noches en las que no podía conciliar el sueño.

Phill se encontraba caminando por el inmenso bosque que daba lugar a las espaldas de su castillo, los arboles mantenían su variedad, pues, no había solo una especie arbolaria, se encontraban más de mil, entre ellas hermosos e imponentes cedros con muchísimos años, el sol que se filtraba por las bellas hojas de los robles, pero para Phill estos no eran de importancia, su árbol favorito se encontraba en el centro de la foresta. Se trataba de un inmenso e único, debido a ser solo uno en un millón allí, era un cerezo de hojas color rosa pastel que le recordaba aquella foto en su dormitorio, donde estaba su madre con una inmensa sonrisa plantada en su rostro con él en brazos.

Tanto caminar sin rumbo le había dejado perdido, en medio de la nada y muy lejos de aquel lugar que le proporcionaba la calidez y el amor que ni su padre, ni su madrastra le dio.

— Lo que me faltaba — pateó una pequeña roca hacia ningún lado aparente — si tan solo no hubiera nacido no tendría que cargar con tantos recuerdos de ti...

Seguía caminando sin rumbo aparente, a lo lejos podía observar el lago precioso cubierto de manglares y si forzaba su vista lograba divisar aquel cerezo diferente.

— ¡Alguien ayúdeme por favor! — una voz medianamente masculina le sacó de sus pensamientos en su llamado de auxilio

Phill corrió hacia la voz por acto reflejo llegando a un barranco observando como unos coyotes gruñían al vacío, al percatarse de su presencia voltearon para atacarlo, pero él con solo un chasquido hizo que los animales desaparecieran para luego observar con temor la mano que se sostenía apenas del borde rocoso

— Ayuda por favor... — la voz del extraño estaba quebrantada, tenía miedo de caer bueno ¿Quién no lo tendría? En el fondo del barranco había unas estalagmitas que en sus puntas poseían un veneno capaz de aniquilar a alguien en cuestión de segundos. La mano del desconocido se resbaló y este ya despidiéndose de su vida se estaba dejando caer, pero no, sintió como una mano fuerte de 15 años le sostenía, al levantar la mirada observó a aquel pelirrojo daba la mayoría de sus fuerzas para sacarlo de su apuro.

Una corriente eléctrica recorrió los cuerpos de ambos jóvenes.

— Sostente — con la piel erizada Phill alzó al muchacho castaño quedando el extraño encima suyo para darse cuenta de que era un imanity gato, un tanto parecido a Dipper, pero con algunas cicatrices en su cara  — ¿Quién eres? 

  —  S-soy Mason  Antónovich  (N/T: esto para el preguntas y respuestas) amo —  como si se tratase de una orden el castaño de ojos pardos que observaban con curiosidad al pelirrojo que había quedado estupefacto al escuchar esa afirmación, sus orejas se movían de manera suave y su cola se meneaba sobre las piernas de Phill 

  —  ¿Amo? NOOO, debes estar equivocado...yo no... —  no pudo terminar al ver como Mason llevaba su mano a su propio pecho — ¿Qué haces con mi mano?

—  ¿Lo sientes? — acercó la mano del otro a los latido de su corazón y puso su mano en en el torso de Phill sintiendo su corazón por igual —  Están sincronizados...estamos destinados. Usted es mi amo y yo seré su sirviente hasta que la muerte decida que ya no tengo que estar en este mundo

Phill estaba sin palabras   mientras solo observaba con ternura al gato en frente suyo, por dentro estaba muy feliz parecía al fin haber encontrado lo que le faltaba, al sentir el tacto de su mano se dio cuenta de que él era para Mason y Mason para el.

Ambos jóvenes se levantaron uno al lado del otro, resultó que Mason había estado viviendo en el bosque desde que tenía memoria junto a su familia, pero, un día unos traficantes de imanitys se los llevaron a todos excepto a él, Mason pudo ver como enjaulaban a su madre, su padre y más importante que todos a su hermana Mabel, eso ocurrió cuando solo tenía 8 años, han pasado 6 años desde que empezó a buscarlos pero nada. Ya había perdido las esperanzas, pero aunque fuera fuerte todos los animales le atacaban de no ser por Phill hace unos momentos estaría siendo comida de coyotes.

  —  Vendrás conmigo al castillo de mi padre —  el mayor acarició la cabeza del felino —  Tu lo dijiste. Serás mío  — dijo recalcando la última palabra —  Esto...Mason..

— ¿Sí amo?  — lo miró algo curioso debido al cambio de tono que había tenido — ¿Sucede algo? ¿Se siente bien? 

El pelirrojo se detuvo en seco. Y se colocó frente a frente con Mason. Le tomó de los hombros y lo miró con esos orbes carmesí que reflejaban todo el sufrimiento que había tenido.

— Gracias por aparecer en mi vida  — con su mano derecha agarró con suavidad el mentón de Mason, el rostro del antes mencionado estaba lleno de un sonrojo que iba de oreja a oreja al ver la sonrisa sincera que le propiciaba Phill — No se como no vine a esta parte del bosque antes para llevarte conmigo ...gatito — en un acto de valentía ambos sellaron sus labios en un beso, las sensaciones eran increíbles pero nada obscenas .

El beso fue roto por la necesidad del aire, ambos chicos siguieron caminando y platicando hasta llegar a las puertas del castillo.

—  Grrrrr —  un gruñido salió de la boca de Mason al ver a Dipper, el antes mencionado le imitó

—  No, ustedes van a llevarse bien —  dijeron Bill y Phill al unísono alzando a sus  imanitys al estilo princesa observando como forcejeaban y se sonrojaban.

Continuara