Estrado y Guillotina(Parte 3/5 maratón)

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Al llegar a la sala de juicio un silencio incomodo invadió la habitación y las miradas fueron dirigidas a la rubia que se encontraba en un vestido negro ajustado y suelto en la parte baja, su temple seguía siendo elegante y su cara no demostraba ni una pizca de miedo o asombro.

Con rapidez se sentó en frente del tribunal y comenzó a observar a su alrededor, el tapiz de mármol que daba la sensación de estar en un cuarto oscuro, las débiles lámparas que iluminaban pobremente el jurado, los asientos de madera que albergaban al jurado, el estrado hecho de roble oscuro, y su esposo inexpresivo lleno de odio.

Bill con Dipper, Pacifica con Mabel, Wirt con Beast y Phill con Nym conformaban el jurado que decidiría la inocencia o culpabilidad de la acusada. El lobo temblaba intentando contener su miedo mientras su amo acariciaba lentamente su muslo en busca de darle paz, un estridente sonido de golpeteo fuerte llamó la atención de todos, el juicio había comenzado.

— Jill Psycotec eres acusada de asesinato agravado contra la reina de este país — dijo Will seriamente — ¿Cómo te declaras?

— Absolutamente culpable, no quiero dar rodeos a una estupidez, yo la maté a sangre fría porque me traicionó

Will se enfureció mucho más al escuchar la vaga declaración llena de desinterés y vagancia y con otro golpe, esta vez con su puño en el mueble de madera, llamó la atención de todos. Con una mirada acusadora observó a Dipper temblando y al rubio a su lado, luego observó a los testigos que se conformaban con Roby, Linda Susan la cocinera real, el viejo McGucket inventor del país y otros personajes más que no conocía.

—Si es así como quieres que hagamos esto, te condeno a... —hizo una pausa al ver como Dipper se escondía en el hueco del cuello de Bill temblando, Will sabía lo que había ocurrido en la celda hace unas horas y por esa misma razón sabía lo tenso que esto sería para el lobo —a la guillotina, tu cuerpo será incinerado y llevado a las mazmorras de los grifones, arderas en el infierno zorra asquerosa

(N/T: Ay no mames.-. Escribí esto medio dormida y ahora lo leo.-.)

El ambiente quedo en silencio dejando a Jill con su irónica sonrisa y a Will con su mirada furtiva que despreciaba respirar el mismo aire que ella.

— Que sea pronto ¿sí? No me gusta cómo me veo en la noche —se levantó airosa de la silla —muchachos llévenme a la celda por favor —los guardias la obedecieron dejando a Will solo con una penumbra a su espalda

—Retírense ¡Ahora! —gritó causando que todos salieran presurosos de aquella sala.

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Bill se llevó a Dipper a su habitación y este se sentó en la cama aun intentando procesar lo que había pasado con el labio tembloroso

—Estas tenso lobito —ronroneó en su oído acariciando suavemente sus hombros de manera cálida y provocativa mientras el menos solo daba algunos suspiros en respuesta —relájate pino

La cosa se puso seria cuando el mayor comenzó a besar los hombros de Dipper y a subir sus besos al cuello del lobo dejando marcas obvias en el mientras se deleitaba con los placidos sonidos que Dipper emitía. Bill tomó delicadamente el frágil mentón del castaño y lo besó con pasión mientras intentaba deshacerse de la molesta ropa que obstruia su camino.

El ruido de golpes en la puerta hizo añicos el momento, Bill bufó y Dipper dio un suspiro aliviante sabiendo que podria caminar en unos dias mientras acomodaba su ropa

—Primo, el tío Will dice que debemos asistir a la ejecución, apresurense —anunció la voz de Pacifica bastante temblorosa

(N/T: lo se, soy mala :3)

— En seguida iremos — esta vez fue Dipper el que contestó mientras Bill insultaba todo lo existente entre dientes

—La próxima no te salvan Pino —sonrió el rubio de una manera inocente que estremeció a Dipper de una manera increible

El ambiente estaba oscuro, al salir de la habitación las miradas se intercalaron entre Mabel, Pacifica, Bill y Dipper al ver que ambos lobos tenían ligeras marcas en sus cuellos. Con cautela caminaron al patio en donde se encontraba el elemento que aterraba a Dipper. La hoja filosa de la guillotina brillaba con la poca luz solar que se filtraba por las nubes del cielo, la madera de roble ahuecada tenía una aspecto horroroso y la cesta de cabezas tenía unas pequeñas manchas cafes que daban la sensación de no haberse usado desde años, la gente estaba reunida al frente del aparato mortal esperando a que trajeran a la acusada para abuchearla e insultarla. Los primos y sus imanitys se sentaron al frente, en la primera fila lo que a Dipper le disgustó bastante. Todo era silencio hasta que unos zapatos de tacon se acercaban haciendo eco por los pasillos, la gente comenzaba a gritar e impacientarse. La imagen de una rubia con un vestido de corse negro largo al final y con detalles rojos en los bordes, una guirnalda roja decoraba su dorada cabellera y su cara estaba pulcra-mente maquillada.

— ¡Matenla ya! — gritaban todos con fervor mientras Jill solo les sonreia con ironia

Los guardias llevaron a Jill al podio justo al lado de la guillotina, la antes mencionada tenia una mano en su pecho agarrando fuerte el camafeo, esperaba el momento indicado para revelar a su prisionera, las miradas se clavaron en Will que habia llegado.

— Si tienes una ultima peticion, usala ahora ¿deseas algo? — dijo con un tono frio y seco hacia la mujer que repudiaba

— De hecho si querido —dijo de manera petulante — Nym acercate por favor , Hay algo que todos tienen que ver en especial tu

Con inseguridad Nym caminó hacia Jill la cual tenia en sus manos de manera visible el camafeo, entonces, lo abrió y de allí salió Zory sorprendida al ver a Nym

— ¿¡Zory!? — dijo Nym con algunas lágrimas en sus ojos, estaba a punto de darle un abrazo, pero...

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Jill no dejó que se intercambiaran palabras, tomó con fuerza el camafeo, lo elevó y...

Continuara 

Se busca sirviente ( billdip) #PremiosBillDip2017Donde viven las historias. Descúbrelo ahora