El pasado de Frank [Frank Iero/MCR]

Capitulo 1

Do you have the time
To listen to me whine
About nothing and everything
All at once
I am one of those melodramatic fools...

Era un aburrido día domingo y Frank estaba recostado en su cama, fumando un cigarrillo y escuchando el álbum dookie de Green Day, estaba tratando de recuperarse de la fiesta a la que había ido la noche anterior, tenia una migraña horrible pero valió la pena ir a esa fiesta, había pasado muchos momentos inolvidables allí

- ¡Francis!¡Francis Iero!¡Bajale a la música! - exclamó su padre furioso desde el otro lado de la puerta
- No quiero - rió Frank burlonamente
- Frank le bajas o te las veras conmigo jovencito - amenazó el padre

Frank de mala gana con el cigarrillo en la boca se acercó a su radio y bajó el volumen

- ¿Así está mejor su majestad?
- Cállate muchacho irrespetuoso - se quejó el hombre

Frank apagó el cigarrillo en un cenicero que había sobre su mesa de noche y se colocó su chaqueta de cuero sobre su camiseta de los Misfits que llevaba ese día, guardó su billetera en el bolsillo de su pantalón y en el de su chaqueta guardó una cajetilla de cigarrillos que solo contenía 5 de estos ya que la noche anterior se la había fumado casi completa, se arregló un poco el cabello frente al espejo, nada en especial solo para no verse tan mal, salió de la habitación y caminó hasta la puerta pero fue interrumpido por su madre

- ¿A donde vas?
- Es asunto mío - respondió este sin mirar a su madre
- Francis anoche llegaste a las 6:00 de la mañana y no diste ninguna explicación, ¿y ahora quieres salir como si nada?
- Voy a la iglesia mamá, a confesarme con el cura - rió este
- Ya basta, ¿puedes hablar en serio alguna vez en tu vida?
- Podría, pero no quiero - dijo este aún con la mano en la manilla de la puerta

La madre suspiró cansada del comportamiento de su hijo y solo se sentó en uno de los sillones

- De acuerdo, has lo que quieras
- Ok, regresaré tarde, no me esperen - dijo y se marchó

Cerró la puerta tras él y caminó por el pasillo hasta llegar al ascensor, presionó el botón y las puertas se abrieron, entró y marcó el número 1 en el tablero, las puertas se cerraron y suspiró colocando sus manos en la nuca, tenía el ascensor solo para el, al llegar al primer piso se encontró con Henry Miles el dueño del edificio

- Buenos días - saludó el hombre
- ¿Es un poco tarde no cree?
- Perdón - se disculpó el hombre
- Son las 5:30 - dijo Frank mirando su reloj de pulsera

El hombre lo miró serio y no dijo nada.

Frank caminó hasta la casa de su amigo Bob, tocó el timbre insistentemente hasta que su madre abrió la puerta

- ¿Qué haces tu aquí? - preguntó seria la mujer
- Vengo a ver a Bob
- Él esta estudiando para su examen de mañana y...no quiere que lo molesten
- Vengo a estudiar con él - sonrió sínicamente Frank
- Mira Frank Iero más vale que te mantengas alejado de mi hijo, creo que eres una mala influencia para el - dijo y cerró la puerta

Frank suspiró pesadamente y miró un árbol que había junto a la ventana de la habitación de Bob, cuidadosamente caminó hasta allí y de dispuso a escalar dicho árbol, cuando llegó arriba se afirmó de una de las ramas y miró a su amigo quien se esforzaba por concentrarse para estudiar, el tatuado quebró una pequeña rama del árbol y la lanzó contra la ventana de este, el rubio levantó la cabeza y miró hacia la ventana

- ¿Frank? - preguntó y se acercó a la ventana
- Hola Bob, he venido a visitarte - rió el castaño
- ¿Y por qué estas allí?
- Tu madre no me dejó entrar, dice que soy una mala influencia
- Frank creo que no deberías estar aquí - dijo nervioso Bob al escuchar los pasos de su madre
- Tranquilo Bob, no pasa nada

En ese momento la madre de Bob abrió la puerta y Frank se lanzó al suelo instantáneamente

- Maldito niño, ¡Te dije que no quería verte por aquí!¡vete y no regreses! - exclamó la mujer desde la ventana

Frank se puso de pie rápidamente y corrió lejos de allí, cuando avanzó un buen tramo, se sentó en el césped de una pequeña plaza, le dolía el hombro por la caída, se puso a mirar el lugar, allí había un anciano alimentando a las palomas, y algunos perros callejeros, Frank encendió un cigarrillo y se quedó allí pensando.

Canción: Basket Case de Green Day