Mientras te cortas las venas y veo la tinta chorrear hasta los dedos de mis pies, te miro a ti, estás impasible, mirándome, esperando a que me mueva, a que corra a detener con todo mi arsenal de versos el manantial negro de tus muñecas, o puede que sólo estés esperando a que haga unirse nuestras tintas. De todas maneras, contengo la respiración, hasta que me des la señal de salida, la señal para sorprenderte y para pelear hasta que el mundo deje de dar vueltas.
Para que lo empecemos a girar nosotros.
El único problema, mi único problema, es que nunca acordamos cual sería la señal.
Dímelo, cuando puedas.
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Animal Nocturno
PoésieEsto, es complicado. Aquí estoy yo, junto con todas mis tonterías demasiado fáciles de interpretar como para que lo haga la mayoría. Pero adelante, querido lector, si ves que puedes, y si formas parte de la minoría absoluta.....aquí está el insomnio...
