» Club de Periodismo « [ Miles X Blake ]

6

Los tres ahora se encontraban en el almuerzo, hablando de cosas sin sentido para distraer a Waylon de su problema.
Pero después de unos minutos se fue con Lisa y prometió que estaría seguro de no volver a tocar el tema.
Al menos después de organizar el reporte.

Por unos momentos la habitación se sumió en el silencio y con ambos chicos en ella, Miles se distraía cambiando de baterías a las cámaras y Blake seguía escribiendo.

— Tengo un buen presentimiento de esto. — Mencionó Blake, rompiendo el hilo del silencio y haciendo una pausa para limpiar sus lentes y sonrió.

— Mmmmmph. - Miles dejó de lado las cámaras. — ¿De qué tenemos muerte asegurada o. .  ?

— Oh, ¡No no! Para nada, hablo de que podemos hacer esto, ¡y será un buen artículo! Estamos tan cerca de atrapar al asesino, ¡Es como si estuviéramos en una novela de Sherlock Holmes!

— No creo que Sherlock se haya preocupado por llevar tantas venditas. — Miles recibió una mirada un poco divertida y arrogante del ajeno, en eso alzó ambas manos asumiendo su  culpabilidad, no era como si debiera discutir con él por ser precavido y mantener la seguridad, Waylon era un poco torpe y ambos lo sabían,  más de una vez le habían ayudado.

Cuando ambos detuvieron las risas, continuaron trabajando, al menos hasta que Blake de quejó y volvió a limpiar sus lentes con algo de molestia.
Miles le miro con curiosidad.

— Necesito comprar nuevos lentes.—  Dijo sin dejar de tallarlos, lo cual era inútil, estaban gastados por todas las aventuras que tenía, de las veces que se le habían caído y rayado en incontables ocasiones. 

Los lentes le fueron arrebatados por Miles, los miro como si fueran un pequeño tesoro y sonrió satisfactoriamente. 

— Tal vez ya no los necesitas.—  Aclaró,  como si eso fuera posible, siendo Blake legalmente ciego sin sus lentes.
En eso decidió ponérselos y pedir su opinión.
— ¿Como me veo?

— No lo sé,  no veo nada. — Mencionó lo obvio y se acercó para tratar de quitárselo y con suerte, conseguirlo.

— ¡Bueno, no están tan malos! Tal vez si los vuelvo a limpiar. . . — Y cuando lo intentó, el cristal de un lado se rompió.

Miles estalló a carcajadas, seguido de un " te lo dije " con dificultad, tomó unos momentos para tratar de no parecer alguien malo y trató de tomar aire.
La culpa se fue cuando escuchó a Blake reír también.

— Cuando los necesites no te reirás de mi.

— No los necesito, y no los necesitaré. —  Afirmó con orgullo.

— Miles, Miles por favor llévame al médico, no veo nada, me esta comenzando a doler la vista y quiero golpearte por eso.

— Oh, si, claro, vamos, yo pagaré  la cirugía que necesitaras.  —Bromeó.—  Si no, ¿Cómo verás cuanto atrape al asesino?

Blake viró los ojos y suspiro, aún que sabía que tenía razón.

Ambos se dirigieron a la puerta, con Miles tratando de guiar a Blake como el típico juego de la gallina ciega

—  Por cierto, ¿Has considerado usar lentillas? Por que así no sería un problema.

Y se veía encantador sin ellos.