Piel dura de mar

Todo queda atrás

Gritos de emoción, palmas y cantos de alegría desde ambos lados.

Cetalia se aleja lentamente de la costa, los más pequeños ven cómo las historias de la Gran Tortuga del mar se tornan reales frente a ellos. Un evento que se presencia en Terrodar cada 31 años aproximadamente.

- Estás despierta, vieja! - se oye decir a un anciano feliz.

Todos recordarán siempre esa ciudad flotando sobre el mar, rompiendo las olas.

La hija de los Cetald aparece tras las cortinas con​ aspecto sombrío, fija su mirada a lo lejos e intenta distinguir las figuras que se alejan en el horizonte.
¿Dónde estará Arane? ¿Será alguna de aquellas sombras lejanas?
"No se alejan ellos, me alejo yo."

Bajo el agua, el inmenso animal marino más antiguo de la historia abre sus ojos después de 15 años de descanso. Mueve sus enormes patas por la arena hacia la profundidad del mar y empieza a nadar.
Durante el trayecto se alimentará de peces y otras criaturas que se crucen por su camino mientras avanza hacia zonas más calurosas.

La señora Cetald baja la pequeña escalera y busca a su hija, que aún mira al exterior.
- Coral, vamos a comer - dice mientras se acerca a la joven -. Después tenemos que visitar al capitán.

-Lo he perdido todo, mamá.
Sentados a la mesa los tres miembros de la familia Cetald intercambian miradas. Forcis, el padre, mira a su esposa con la esperanza de que diga algo. Ella, Casia, mira a su hija y por un instante su mirada es triste, pero pronto adopta una actitud impasible. La mirada de Coral los desafía a uno y otro, penetrante.
- Sabemos cómo te sientes y comprendemos tu enojo, pero debes entender quién somos y cuál es nuestro maravilloso hogar.- rompe el silencio Casia.
- No sabemos hacia dónde vamos, somos esclavos de un monstruo!
A sus padres no les gusta en absoluto que hable así de Cetalia, lo sabe perfectamente. Está enfadada y siente la impotencia de no poderse rebelar, por eso a penas piensa en lo que dice.

Siente que está perdiendo todo lo que conformaba su vida y su personalidad. A sus amigos, conocidos, todos aquellos lugares que conoce desde pequeña y lo habitual de su día a día.
Adoraba correr por las calles de Terrodar, los juegos en la plaza junto a sus compañeros...
No puede siquiera pensar en que no volverá a ver a Arane nunca más, le duele demasiado.
Arane ha sido su mejor amiga desde que tiene consciencia. Siempre han estado juntas y jamás se han cabreado entre ellas a pesar de tener algunas diferencias.
"Jamás volveré a sentir la verdadera amistad..."

Casia termina de servir las raciones y se sienta junto a Forcis en la mesa. Él es el primero en probar bocado.