Un Bebe Y... Un Hitman¿?

Capitulo 11

Fong todavia continuaba en el hospital al igual que el lacayo, Verde se mantenia cuidandolos mientras continuaba investigando los rastros de la familia que habia atacado, Haya llevaba sintiendose triste por no ver a Leon y Reborn no sabia que hacer respecto a eso, en primera no tuvo alternativa respecto a cuidarla, estaba rumbo a su trabajo con Haya aun dormida, habia tomado el muñeco de el como reemplazo de Leon para poder dormir.

-No quiero pensar que sera en el trabajo al llegar contigo...- Miraba por el retrovisor a su pequeña y suspiro, habia de todo tipo en ese trabajo, solo se imaginaba que Haya estaria rodeada de muchas de las secretarias y gente extraña, preferia no salir de la oficina para nada pero eso seria imposible con la acumulacion de trabajo que tenia, y la reunion que tendria ese dia.

-Buenos dias, Señor Reborn.- Le dijo la recepcionista, pero se quedo callada al mirar a la bebe en brazos de aquel hombre de mirada fria.

-Buenos dias.- Dijo de manera seria, al mismo tiempo que caminaba mas rapido. -Es un hecho que hoy conoceras a mucha gente.- La pequeña Haya comenzaba a abrir los ojos, vaya que le hacia falta Leon, habia costado un poco el dormila debido a que ella buscaba a Leon, solo durmio porque sus pequeños ojos no podian mas.

-Haya, estamos en mi trabajo y vas a conocer a muchas personas hoy.- La pequeña se quedo callada mirando a su padre, quien le mostro una oficina bastante espaciosa, con una gran vista y elegancia. -Vamos.- Reborn le dio su biberon a la pequeña que lo acepto gustosa, Reborn lo consideraba extraño, los bebes no aceptaban los cambios, lloraban casi siempre por todo pero aquella pequeña no lo hacia, era raro que llorara y reia mas incluso cuando pedia de comer o su cambio de pañal.

-Asi que aceptaste la oferta de tenerla aqui...- Reborn miro a su jefa que cerraba la puerta evitando la vista de todos los visitantes que estaban afuera de la puerta.

-No tenia mucha alternativa.- Los dos se sonrieron.

-Comprendo, todavia es muy pequeña para estar en la guarderia... Ademas siempre es lindo ver sus primeros años de vida.-

-De verdad no le molesta el que la tenga aqui?-

-No, pero pienso que a lo mejor se incomoda por la cantidad de gente haya afuera.- La bebe que habia terminado su biberon miro a la mujer y comenzo a reir. -De verdad, que linda... Vamos...- Los dos salieron, ella con la pequeña Haya en brazos, se veia a todos simulando.

-¿Que hacen aqui?- Todos se espantaron ante aquella voz autoritaria, mirando a la mujer cargando a la niña que miraba la cantidad de gente un poco asustada. -Quiero a todos en sus puestos... En un minuto... Al que lo encuentre fuera de su lugar, lo despido...- De inmediato todos corrieron dejando el pasillo despejado con solo las secretarias en su escritorio, la bebe comenzo a reir ante el acto, Reborn noto a las secretarias que sonreian ante la bebe.

-Bueno... Ven un momento.- Fueron a la oficina principal donde los dos discutieron cosas del trabajo y lo sucedido la ocasion anterior en la ultima junta.

-Vendran algunos posibles socios el dia de hoy, lo que agradesco es que hayas terminado la presentacion antea de tiempo.-

-Le dare la ultima revision para evitar imprevistos.-

-Durante ese tiempo, sera mejor que yo tenga a la niña, si la dejamos con tu secretaria terminara rodeada de gente.- La bebe miraba a la mujer mientras hablaba.

-Siento mucho las molestias que le estoy ocasionando.-

-No son ningun tipo de molestia.- Dijo la mujer mirando a la bebe. -Yo ya no soy tan joven como paresco Reborn...- Dijo mirando a la ventana. - Deje muchas cosas pasar por crear esta compañia, y comprendo lo que implica, situaciones y problemas, de lo que yo me prive.-