Mafia Roja

Capítulo 6

Multimedia de hoy: Maxim Krutzev (Alexander Skarsgård)

-Tanya, ¿qué diablos estás haciendo?- Preguntó Alexander muy sorprendido. -¿Qué son esas maletas?

-Me largo de aquí Alexander, ya no lo soporto.

-¿De qué hablas?

- ME LARGO, ESO DIJE. SE ACABÓ.- Gritó ella. -Llevo aguantando hace años pero esto fue el final, incontables noches esperándote con la cena lista y tú nunca apareces, asesinas gente en nuestra propia casa, droga, armas, sangre, violencia, no lo puedo tolerar más. Nunca aprendiste a separar tu trabajo de tu familia.- Espetó sin aliento.

-NO TE IRÁS A NINGÚN LADO.

-Ya está tomada mi decisión. Necesito tiempo Alexander.

-Tanya, no puedes hacerme esto, por favor.- Dijo con la voz un poco quebrada. -¿Esto es porque no tenemos sexo?, porque puedo arreglarlo.

-NO ES POR ESO ALEXANDER, POR FAVOR.- Dijo ella abriendo la puerta del dormitorio y bajando las escaleras con las enormes maletas.

-Mamá, ¿qué haces?- Preguntó Klara con los ojos llenos de lágrimas desde la planta baja. -¿No pensabas despedirte, al menos? Por favor no te vayas, no sé qué haría aquí sin ti aquí.

-Puedes venir conmigo, si eso quieres.- Ofreció su mamá. -o quiero despedirme, o puedo, sería muy doloroso.- Agregó.

-¿Klara?, ¿tu también me abandonarás?- Preguntó Alexander incrédulo desde la planta alta.

Klara subió las escaleras como relámpago y abrazó a su padre.

-Te amo papá, pero no puedo quedarme aquí.- Dijo entre sollozos. -Estaría completamente sola, quiero irme con mamá.

Alexander lo entendió y las dejó ir, sabía que no había fuerza en el mundo que las haga cambiar de opinión.

Dmitri luego de escuchar todo sin dudarlo fue hasta donde estaba su padre.

-¿Qué acabas de hacer, papá? Las dejaste ir.- Preguntó incrédulo.

-No puedo hacer nada, hijo.- Contestó él con un aire de tristeza.

-Claro que puedes, lucha por ella. ¿La amas o no?-

-Todo ocurre por algo, déjalo así.- Respondió su padre sin ánimos de continuar esa conversación. -Estaré en mi despacho, no quiero que nadie me moleste por el resto del día, por favor.-

Dmitri asintió levemente y fue hacia el gran parque trasero de la mansión, donde se encontraban Maxim, Nikolas y Varvara fumando y charlando.

-¿Escucharon todo lo que pasó?- Preguntó.

Los tres asintieron levemente.

-Papá me ha pedido que nadie lo moleste por el resto del día.- Agregó Dmitri algo sorprendido por la falta de reacción en la cara de sus hermanos.

-Nunca lo vi así. Me siento muy mal por él.- Dijo Varvara por fin.

-¿Y por mamá y por Klara no?- Recriminó Dmitri.

-Mamá siquiera se ha despedido de nosotros, cogió sus maletas y desapareció por la puerta como si nada. Estoy muy molesta con ella. En cuanto a Klara, ella es una cobarde, escoge siempre la vía fácil. Nos dió la espalda a todos nosotros, SU PROPIA FAMILIA.- Espetó indignada mientras daba una calada a su cigarro.

-¿Ustedes qué creen?- Preguntó queriendo saber la opinión de sus dos hermanos mayores.

-No diré nada al respecto.- Murmuró Nikolas.

-Yo tampoco.- Concluyó Maxim. - Y si me disculpan, debo irme.- Dijo apagando la colilla con la suela de su zapato.

-¿Y eso?, ¿dónde vas?- Preguntó mi hermana.

Maxim le guiñó el ojo.

Yo negué con la cabeza, me pareció algo inoportuno. ¿En qué andaba metido?