Cap.1/ Se callan o reporte.

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Voy entrando a la escuela que conozco perfectamente ya que estoy en ella desde mis inicios.

—Hola Tati— Saludo a mí mejor amiga Tatiana y las dos entramos.

Me siento extraña al entrar porque aunque conozco el lugar por el tiempo que llevo allí, no es lo mismo, ahora entro a cuarto año y es otra edificación, por cierto con muchos pisos, ¿y adivinen qué? sin elevador.

—Hola Yakora— dice Sam muy feliz, porque en las vacaciones mis amigas y yo no pudimos reunirnos, por distintas razones, Tatiana porque se fue a Milán de vacaciones, Sam porque estaría cuidando a su abuela y yo simplemente porque ellas no estaban.

—Hola— saludo yo con la misma emoción de mi amiga.

—¿Viste al nuevo chico?— dice muy emocionada, sonrio, estoy empezando a reconocer a la Sam de siempre, emocionada por cualquier chico nuevo que entra, creo que para ella es como carne fresca o nueva mercancía, me río de mis pensamientos y digo:

—No, acabo de llegar con Tatiana y no lo vi— digo confundida.

—No te preocupes ahora lo vas a conocer, voltea, te está viendo— yo voltee a ver, algo confundida.

Lo vi y mi mente dijo- Wow que chico tan... Guapo, era un chico de cabello negro y ojos grises realmente guapo, pero lo olvidaré, siempre he dicho que los chicos no son como aparentan, además es mí primer día y vengo para estudiar no para vivir una historia de amor.

—¿En serio Sam?, acabamos de empezar el año y tú estas empeñada en novios, eres tan Sam— digo moviendo la cabeza de un lado al otro mientras sonrió

—Y tú eres tan molesta—dice recogiendo sus cosas para entrar al salón, claro antes de caminar, detenerse a ver al equipo de baloncesto hacer su entrada triunfal como todos los años, son chicos guapos y atléticos por eso creo que las únicas que ven esa entrada somos las chicas.

Mientras camino choco con alguien, miro, solo adivinen, si, el chico que vi hace unos minutos en el pasillo, con su tonta sonrisa, no me ayuda a pararme solo me ve a los ojos, con esos ojos grises tan hermosos que tiene... Y esa sonrisa y...

¡Yakora concentrate en este momento estas enojada!

—Hola—dice con su cara que solo dice, soy súper guapo y por eso vas a caer en mis redes y yo por supuesto jamás caería en la red de un creído como él (o al menos eso aparenta), bastante tengo con los que me rodean a diario.

—Hola—digo algo seca, en serio se ve en su cara que se cree lo mejor que pudo llegar al planeta.

—Te vi con tus amigas hace un rato, mí nombre es Zack soy nuevo, y necesito una nueva amiga, ¿quieres ser mi amiga?—dice con una sonrisa de oreja a oreja, mientras alza la ceja esperando que yo sea como otras que ni siquiera lo pensarían, pero yo no soy como todas las chicas, soy yo.

—No—digo parándome y en ese transcurso riendo por su cara cuando dije que no, creo que tenía la idea de que iba a decir que sí, me paro riendo, sin que me vea porque no está muy feliz que digamos, aunque todavía sigue con su cara que solo dice, soy el mejor.

—¿Y porque?, para ti sería un honor que yo te pida ser mi amiga, ¡soy Zack Miller!— dice con algo de sarcasmo, que a mí no me causa nada de gracia, me molesta los chicos así, que solo se me acercan porque les parezco bonita, no con la intención de conocerme, si no con la intención de buscar una aventura, buscar algo para pasar el rato.

Podrán decir que soy una antipática, pero no, solamente que lo veo y me causa enojo, no es que sea así con todo el que me pase por al lado, solo ese chico hace que me porte así.

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