—Claro, si no me escribes, ya te olvidaste de mí— escribo triste por que puede ser esa la razón por la cuál Thomas no me escriba, el sigue siendo uno de mis mejores amigos, pero a cambiado mucho, pero todavía recordado como una buenas personas que llegaron a mí vida.
— Tu a mí tampoco me escribes, pero bueno, ¿cómo estás? — Escribe.
— Bien y tú — le escribo porque aun que no lo considero mi mejor amigo porque para mí un mejor amigo es alguien que esta ahí sin importar lo que pase, lo extraño, con el pasaba los mejores momentos y los más divertidos.
Así continua nuestra conversación la típica, ¿cómo estás?, ¿qué haces? y así hasta que nos despedimos y yo me despido de Sam y ahora llegó la hora de dormir y descansar que mañana sera otro día y además uno muy malo y deprimente, porque compartir toda una tarde junto con Sofía, que tortura, pero lo que uno hace para pasar una materia.
( . . . )
— Yakora, tu hermano tiene el mismo color de ojos que tu — dice mi padre mientras abraza mí hermanito.
— Si es tan hermoso — digo jugando con mi hermano.
— No es hermoso que tengas dos hermanos con los que puedas jugar — dice mi padre con una sonrisa.
— Si, además que tengan una edad cercana a la mía es increíble — digo mientras doy saltos en el lugar.
Despierto de un golpe por aquel sueño que tuve, otra vez soñando con papa, ya me voy a acostumbrar, aunque nunca dejara de parecerme raro que todos los días ande soñando con el no se si sea una señal o solo es un simple sueño.
Me levanto, me baño y cepillo para ir a la escuela.
Me cambio y en esta ocasión me pongo un vestido, si raro pero tengo calor y no ire con algo con lo que posiblemente me queme por dentro.
Desayuno y abro la puerta para salir y entrar en el auto de Zack y ir a la escuela.
( . . . )
Entro en la clase de la maestra Valeria y ella comienza explicarnos una teoría de las ciencias, no se no le estoy prestando mucha atención que digamos, hasta que por fin se acaba la clase.
— Pueden salir — dice la maestra y todos automáticamente salimos.
Si, es como los caballos, cuando abren la puerta de su establo, salen todos dispararos, así mismo es en la clase de la maestra Valeria.
— Usted no señorita Richard — dice la maestra, haciendo señas con los dedos de ven acá.
— ¿Qué pasa maestra Valeria? —
pregunto con curiosidad.— Sus notas han bajado mucho últimamente, quiero saber el porque — inquirió la maestra y tiene razón en su materia mis calificaciones han bajado mejor dicho mis calificaciones estan como una montaña rusa.
— No se maestra, pero prometo esforzarme mucho en química y mejorar las calificaciones así se sentíra orgullosa de mí y lo más importante yo me sentiré orgullosa de mí — digo sonriente, pero la maestra dice algo que hace que mi sonrisa se desvanesca.
— Eso espero, porque si no tendrá que repetir el curso — dice y en ese momento me preocupo demasiado, nunca había repetido el curso porque siempre fui una buena estudiante pero ahora eso esta cambiando.
— Se lo prometo — digo antes de salir.
Camino por los solitarios pasillos de esta escuela hacia mí casillero los desbloqueo y entro mis cosas saco mí libro de ciencias y me siento en el frío suelo a estudiar, para volver hacer una de las mejores estudiantes de la clase, pero alguien muy molesta me interrumpe.
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Distintos
Novela JuvenilA veces pensamos que lo distinto no es genial no rompe barreras, pero esa es la idea equivocada a la que se ha aferrado el ser humano, lo distinto es increíble porque rompe estereotipos. Esta es mi historia soy Yakora Richard y soy distinta, tal vez...