Los Potter: El Principio

2• Cartas

22 de Junio, verano por lo tanto cumpleaños del "bebé" de la familia Dudley.

El cual hacía pataletas porque había recibido menos regalos que el año anterior. Petunia tuvo que prometer comprar tres más después de llevarlo al zoológico.

Catherine regreso a vivir con sus tíos después de 2 años tres meses de vivir con su tía Amelia. Se preguntaran ¿por qué?

Desgraciadamente falleció, aparentemente estaba desahuciada, la azabache no se entero hasta que los síntomas fueron evidentes y no le quedo más que aceptar el destino de su tía.

A Catherine nunca le dijeron la verdadera razón de su muerte. Siempre tuvo el presentimiento de que su tía y Meredith escondían algo, ahora era imposible saberlo pues Meredith se negaba a decir algo. Extrañaría a su tía Amelia cada día.

El testamento que dejo fue muy claro, dándole él poder de la elección, recito:

Mi heredera universal es mi protegida Catherine Lilían Potter, podrá disponer con libertad de su fortuna a la edad de diecisiete años.

A Catherine esto le pareció extraño, pues la mayoría de edad era a los diesiocho. Esa cláusula solo reafirmo el hecho de que pensara que murió escondiéndole algo importante.

Hasta entonces mi secretaria y amiga la señorita Meredith Christenson, administrara el dinero, será su tutora legal y ocupara mi puesto en mis negocios, como recompensa y agradecimiento por su maravillosa amistad, lealtad y buen trabajo. Le dejare mi casa en el centro de Londres, de cual podrá disponer cuando quiera. Todo con la condición de que cuide, organice y eduque correctamente a mi protegida.

Para la familia Bilson les dejo la casa donde han vivido desde hace veinte años, más una suma de dinero considerable, según las necesidades para la educación de su hijo Hayden Bilson. También conservaran sus puestos de trabajo y sus mismos sueldos hasta que ellos decidan dejar su puesto o fallezcan.

Mi protegida podrá seguir viviendo en la casa de las afueras de la cuidad, o en dado caso de que su decisión fuese volver a lado de su hermano Harry James Potter, en casa de los Dursley en Privet Drive. Tendrá que seguir con sus actividades y estudios.

Pensando en la distancia que hay entre ambas casas, tomará sus clases y actividades en la casa de el centro de Londres, la cual pasara a manos de Meredith Christenson. A los Dursley, y solo en caso de recibir a mi protegida de nuevo. Se les dará una mensualidad por su hospitalidad -si claro "con lo bondadosos que son" nótese el sarcasmo- y gastos que está ocasione, en caso de que no sea cuidada adecuadamente, sea maltratada o no le permitan asistir a sus clases y actividades correspondientes, se les retirara el apoyo tanto mensual como para el de su empresa.

Claramente Catherine decidió volver. Aun con todo el dinero que tenía y no le faltaba nada económicamente hablando. Seguía necesitando de Harry, más después de la muerte de su tía Amelia. Le había afectado mucho le llegó a tomar demasiado cariño.

Las cosas en casa habían cambiado, Meredith ya no pasaba tanto tiempo en ella, sólo la veía por las noches y si tenía suerte también por las tardes, la pobre tenía muchísimo trabajo ahora que era la cabecilla de los negocios de la señora Hamilton. Hayden por su parte, se fue desde que cumplió once años, a un internado, nunca escribía, ni llamaba no sabia nada de él y nunca dijo el nombre de su escuela -más misterios- así que ella prefería estar en una "cama" pequeña, en una alacena con su hermano, que dinero. Aunque eso no era del todo cierto pues Meredith solicito de inmediato que a los hermanos se les diera una habitación adecuada para dormir.