El 25 de diciembre había dormido una hora y esa hora había soñado que veía como un sapo era despedazado por las rieles del tren.
Más tarde ese día cuando fuimos a comprar un celular para el crucero del abuelo vi claramente como el tren terminaba con la vida del pobre animalito había sangre en aquel fierro y en la tierra.
Como era de esperarse había tenido que pensar demasiado tratando de encontrar a un culpable...recordé que Bruce había entrado a mi cuarto y lo llamé, pero para mi sorpresa el había dejado algunos regalos debajo de mi cama y uno de ellos era un flash donde ponía tan solo 10 razones las cuales yo debía darle una oportunidad, obviamente esto era algo preocupante...no sé dónde había surgido ese sentimiento, desde aquel día ignoré a Bruce un 90% del tiempo...
Charlie había viajado a Italia porque debía ayudar en el negocio familiar pero volvería en dos semanas.
En tres días más el abuelo llegaría de aquel crucero, y si mis pesadillas eran reales....nada saldría bien.
Estaba en mi cama sentada en posición de indio con una taza de té verde, aún tenía el libro o...¿cuaderno? Cuando había empezado a hojear este me di cuenta que aún tenía algunas cosas escritas.
De todo lo escrito solo pude reconocer una; el sueño detallado de Peter, el sueño con el que falleció.
Pero habían descripciones bastante detalladas de otras personas que -estoy segura- tenían el libro en su poder.
Mi celular vibró anunciando un nuevo mensaje, lo cual me saco de mis pensamientos haciéndome dar un salto derramando té verde en la cama.
'Kimberly, algún día vas a tener que escribirme, no puedes seguir ignorándome, es una acción totalmente inmadura...sino quieres salir solo dime que no, no es como si fuera a obligarte'
-Bruce
Sentía que debía responder, una semana ignorándolo había sido suficiente y muy cobarde de mi parte, nunca había salido con nadie y tenía miedo de salir lastimada con siquiera haberlo intentado, así que respondí
'Ven a mi casa a las 6' a lo que contestó:
'Iré a las 4:30 tengo que ir al taller a las 6'
Eran las 2:47 y todo en la casa era un desastre había tratado de limpiar todo y de arreglarme un poco, terminando de hacer esto a las 3:50...había sacado a pasear a Duke y comprando algunas cosas del supermercado...y una cena para cuando bruce me dejará.
Estaba regresando a casa y el ya estaba en la puerta esperando.
-Hey!-
-Kim- se acercó y me saludó con dos besos en la mejilla.
-Vamos adentro...¿Te quitaron los brackets?- dije al notar su dentadura 'perfecta'
-Si, quería contártelo pero estabas ocupada ignorándome, ¿que fue lo qué pasó?-
-Pues no mucho solo me llego el libro embrujado y creo que moriré, ah y también se me declaró el chico que creí que me veía como un hermano, y mi mejor amigo me dejó sola porque tiene que cuidar su negocio familiar, también mi madre y padrastro y hermana se fueron a Canadá pues la señorita 'perfección' necesita conocer a la familia que la cuidara allá, lo cual significa que estoy completamente sola en este mundo, pero no es nada y tu?- respondí sarcásticamente
-Kim, kim-dijo negando con la cabeza-tienes que dejar de ser tan dramática, solo debemos agarrar el libro y quemarlo, o tirarlo, no es como que un estupido libro te siga, o ¿si?-
Tenía razón! Había estado demasiado ocupando siendo tan pesimista que creí que ya había muerto, cuando en realidad las personas que tenían el libro nunca se detuvieron a pensar en maneras de deshacerse del libro .
-BRUCE!! Tienes mucha razón!- dije dándole un abrazo, al separarme el me miró a los ojos y luego a los labios...¿por qué me sentía así? Mis manos se aferraron de su cuello y sentí su fragancia a bosque... el por su parte se había detenido a ver (supongo) las facciones de mi cara, se estaba acercando y todo en la sala ahora era silencio, posó su mano izquierda en mi mejilla y se fue acercando lentamente hasta estar a unos escasos centímetros de mis labios, me miró a los ojos esperando respuesta y lo único que hice fue cerrar ese espacio que nos separaba. Después de unos segundos me aparte
-Bruce yo no había besado a nadie antes- solté impulsivamente
-Por la calidad del beso puedo creerlo- dijo burlón
-Me da mucha vergüenza-
-tranquila, se que te gustó desde aquel día que te conocí en la cafetería-
-Ah si?-
-Podría decirse que si, pero entonces continuando con mi propuesta, eso es un si?-
-sí.-
El resto de la tarde había visto películas con el, y me había ayudado en mi italiano. Se olvido de ir al taller por lo que los dos quedamos en ir por bessy al día siguiente. Me dijo que el se desharía del libro y que se lo entregue, lo cual hice sin dudarlo... ya en mi puerta el taxi esperaba para llevarlo, me dio un pequeño beso y se fue.
Bruce Motta llegaste en el peor momento, pero aún así quiero conservarte.
