Un joven Alpha en busca de su mate, y una chica llena de rencor y deseo de venganza.
El destino tiene escrito algo para ambos, pero ninguno lo sabe.
Sólo los secretos son los protagonistas de esta historia.
No, esta no es la típica historia llena...
Andrew llevaba hablando más de 30 minutos sobre como haría su vida con su pareja, Ethan ya estaba harto, no por que lo envidiase, sino, por que creía que se estaba adelantándose sin saber siquiera el nombre de la chica.
- Sé que no entiendes lo que siento, pero si te estuviera pasando sabrías como me sien... - Si, Andrew, por si no lo sabes, sé cómo te sientes, por que yo también lo sentí - Lo interrumpió enojado - y sé mejor que nadie como se siente encontrar a tu pareja, el que no entiende como se siente perderla, eres tú, puedo entender que estés feliz y me alegro por ti, pero no digas que no entiendo como te sientes, por que sabes mejor que nadie en esta manada que sé cómo se siente, ¿acaso crees que olvidé como me sentí cuando encontré a Jessica? - Está bien Ethan, lo siento, de verdad lo hago - dijo Andrew con la intención de terminar ese tema - lo dije sin pensar, ¿sí?, no quiero seguir con este tema, sé que no te gusta - Ya lo empezaste, no quieras terminarlo como si no hubieses hecho nunca - Ethan no podía ocultar su enojo, y que él estuviera así, era extraño - Dije que lo sentía, y lo repito si lo quieres escuchar de nuevo - ¿Lo dices por que lo sientes de verdad? Por que no si es así, no se nota.
Ethan abrió la puerta, se encontró con Emily, quién se había ido antes de la universidad para ver a su hermano.
- Espero que a ti no te diga que no lo entiendes - dijo Ethan mientras se iba.
Emily no entendía de que hablaba, entró a la habitación de Andrew y cerró la puerta para poder conversar tranquilos.
- ¿Qué pasó? - preguntó Emily - Dije algo que no debería haber dicho, y lo hirió - reflexionó Andrew - ¿A eso se refería con lo que me dijo antes de irse? - Si, o eso supongo - se sentó en la cama y miró a Emily, quién le sonrió - ¿Quieres hablar al respecto? - ¿Al respecto de qué? - se hizo el desentendido, mientras Emily se sentaba a su lado y él la abrazaba - Al respecto de tu compañera, tonto - ¿Qué quieres que te diga?, encontré a mi mate hoy, cuando llegué como de costumbre a la Universidad, y es una chica que no la había visto nunca en esta ciudad - Y, ¿cómo te sientes? - Como nunca antes, me siento completo, quiero decirle a toda la manada que ella es su Luna y que la respeten - Creo que se te olvida una pequeña parte en este puzzle - ¿A qué te refieres? - preguntó confundido - A Brenda, deberías hablar con ella, aún cree que te vas a casar con ella - ¿No se va a aburrir jamás? - No lo creo, es mejor que lo hagas cuanto antes - Lo haré hoy mismo, pero, antes quiero saber algo sobre mi mate, creo que tú puedes ayudarme - No sé mucho respecto a ella, sólo sé que se llama Kayla y no quiere verte - Lo sé, le hice daño, pero no fue con intención, en mi defensa fue la adrenalina - Está bien - rió Emily - tengo cosas que hacer, te veo más tarde.
Emily salió de la habitación, pero había dejado pensativo a Andrew con respecto a Brenda. Tenía que hablar con ella, y lo haría ahora mismo para no alargar la situación.
En otra parte de la ciudad de Whitehorse, estaba Thea con Jackson, ambos estaban entrenado combate con palos.
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- ¿Qué quiso decir Andrew? - le preguntó Jackson agitado - No tengo la menor idea - respondió de la misma manera - Creí que habías leído sobre esas cosas - Lo hice - en un descuido de Jackson, ella lo golpeó con el palo - ¡No te desconcentres! - Empecemos de nuevo - dijo mientras comenzaban a golpear y esquivar los palos - ¿qué fue exactamente lo que te dijo al oído? Me refiero específicamente a lo que nadie escuchó - Me dijo que era suya - rió Thea - pero, nadie parecía estar asombrado - Nadie lo escuchó, Thea - Claro que lo hicieron, son licántropos, tienen mas desarrollados todos los sentidos - ¿En verdad te hizo daño? - No, sólo quería que me soltara antes de sacarle los ojos - dijo llena de rencor - ¿Cuál es el plan, ahora? - Cambio de planes, primero, entender lo que dijo el imbécil que es tu amigo y, segundo, hacer que cualquier persona reconozca lo que son.
Dijo con frivolidad mientras terminaban el entrenamiento.
Como había dicho antes Andrew, debía resolver el tema con Brenda lo antes posible y antes de que fuera demasiado tarde. Marcó su número en el celular, y esperó hasta que contestó.
- Hola Andy - respondió - no te vi hoy en la Universidad - mintió - si quieres podemos vernos ahora - le dijo con un tono caliente - Si, eso quería exactamente, ¿podrías venir a mi casa? - Claro, me arreglaré un poco y luego me voy para allá, ¿está bien? - Perfecto, te espero.
