¡Olvidadiza!

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Cuando estaba en casa, antes de llegar a la puerta, Jorge me paró para hablar.

-¿Tienes un momento?

-Todos los que quieras -le sonreí-.

-Vaya, gracias -y me devolvió la sonrisa-. Verás, quedamos hace unos diez días.

-¡¡Ostras!! Se me olvidó, lo siento tantísimo...

-¿Se te olvidó a ti también? Creía que era el único y que te habías enfadado.

-¿No fuistes tampoco? Menos mal. Y yo aquí, huyendo de ti porque no quería ver tu cara decepcionada.

-Yo creía que lo hacías porque estabas enfadada.

-Pues no, la verdad, no -dije con una sonrisa un poco más amplia-.

-Menos mal, me alegro entonces -me dijo algo aliviado-.

-¿Y te apetecería quedar mañana?

-¿Tú y yo solos?

-Y Vero -le miré con cara de "seguro que dices que si... te mola"-.

-Eh... V-vale, ¿porque no? No me importa -dijo tartamudeando un poco-.

-Entonces, estupendo, ¿mañana a las cuatro?

-Te esperaré aquí, en tu puerta.

-De acuerdo -sonreí, abrí la puerta, me despedí de él con la mano y cerré la puerta-.

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Después de comer, darme una ducha y hacer el deber, se hicieron las cuatro. Salí de casa y en ese momento ví a Jorge cerrando su puerta con llave y, al girarse y verme algo curiosa, me sonrió un poco tímido. Abajo nos esperaba Vero y Jorge se puso un poquito colorado a lo que Vero contestó con otro sonrojo. ¡Eran adorables!

-Bueno, ¿a dónde vamos? -dije para romper el silencio-.

-Había pensado en ir a la paraeta que hay en frente de el parque, si no os importa. Y, si Jorge quiere, ver una peli en mi casa ya que mis padres no están.

-C-claro, n-no me importa, y-yo... -recobró la compostura-. Yo no quiero molestar.

-Oh, no molestas -dijo Vero con una de sus más dulces y humildes sonrisas-.

-¿De verdad? -a lo que Vero asintió con la cabeza-.

-¡Estupendo! Pues pongámonos en marcha.

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Jorge y Vero tenían muchas cosas en común, se compraron entre los dos un montón de calaveras de pica-pica. Mientras, yo, les hacia hermosas fotos juntos sin que se enteraran, salían muy bien en todas. Y mientras veíamos la película, ellos, comían las calaveras pica-pica y yo me hinchaba a regaliz. Amo el regaliz.

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Un final un poco rarito... Ejejeje :P

(coments^^)

¿Crees en el destino? (#24)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora