Capítulo 6 (Prt.1)

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Los chicos estaban repartidos entre los sillones y sofás de la sala con un montón de copas, bebidas y cosas para picar encima de la mesita. Estaban charlando animadamente de varios temas, hasta que llamaron a la puerta. El peliblanco se levantó, dando una señal a todos de que el iría.

Abrió la puerta - ¡Oh, Margaret! Que agradable sorpresa. - Dijo el alto con una voz seductora.

La de cabellos rizados enarco una ceja - Ya sabias que iba a venir, Jackson o mi hermano te lo deben haber comentado. - Esta se quitó su chaqueta y la colgó, no sin antes dejar su maletín y una bolsa grande encima del mueble del recibidor.

El peliblanco rasco su nuca - Si, la verdad es que me lo soltó Jackson. Se lo dijo su chico... - La más baja puso los ojos en blanco - De todas maneras, ellos no han podido venir, se fueron a cenar a casa de los padres de Mark.- Ella asintió, pues ya lo sabía.

- Parece que voy a estar sola con un caballo hormonado, el narcisista regañón, un extraterrestre, un gruñón azucarado, el conejo ciclado, un mochi de fresa, el lanzallamas coqueto y... - Miro de reojo al peliblanco - un monstruo con el poder de destrozar cosas con solo tocarlas. - Acaricio su sien intentando asimilar, porque había decidido ir a esa casa de locos.

- ¡Ya te lo dije! - Alzo la voz exasperado - ¡No tengo idea de cómo fue que tu móvil se incendió! - La menor cruzo los brazos con una mirada inquisitiva - Yo... solo.... lo toq... - Bajo su cabeza un tanto colorado y la castaña se palmeo la frente.

- Bueno, te perdone cuando me regalaste esto. - Señalo su funda de móvil de Junjou Romántica - Así que olvidemos el asunto.

El alto abrió los ojos exageradamente - Ha pasado un tiempo desde que te lo di. No pensé que mi regalo, fuese tan importante para ti. - Comento con los ojos brillantes y sonrisa coqueta.

- ¡Ehhh! Para el carro. - Puso las manos en el pecho de este para que no se acercara más - Es uno de mis animes favoritos y por eso lo tengo todavía. - Revoloteo los ojos.

Namjoon bufó frustrado, este había intentado de todas las maneras posibles que Margaret le diera una oportunidad, pero en todas las ocasiones se vio friendzoneado. El rubio ya le aviso de que era un hueso duro de roer, pero no pensó que lo fuese tanto, como para estar rechazándolo durante varios meses.

- De verdad que a veces pienso que tendría más suerte si cambiara de acera... - susurro sin pensar. Se dio cuenta de lo que había dicho y negó ágilmente con su cabeza, era una estupidez, pues nunca le atrajo los hombres.

Ambos pasaron a la sala y los restantes saludaron a la de cabellos rizados mientras que tomaban asiento. Al rato, cada uno fue contando pequeñas anécdotas de su infancia. Como YoonGi casi se ahoga y su padre lo salvo; a Jimin lo grabaron bailando en ropa interior; Namjoon y su tendencia a romper cosas desde que era pequeño; la supuesta declaración de una chica de segundaria hacia Seokjin; Jungkook siempre lo compararon con un tierno conejito (Hasta empezó a imitar a uno cuando lo comentó); Taehyung dije que tenía muy buenos recuerdos con su difunta abuela (El castaño mechado le acaricio la espalda, mientras que los demás observaban preocupados, a los que este sonrió y contesto que ya estaba bien). Llego el turno de Keith, pero este negó con la cabeza, todos menos su hermana y el rubio se quedaron extrañados.

- No hubo nada interesante, por lo tanto no hay nada que contar, se aburriríais. - Forzó una sonrisa que engaño a los chicos, pero no a su mejor amigo y a su hermana.

Yoongi frunció el ceño - Has sido tú el que ha tenido la idea de contar estas cosas, sería injusto que no contaras ninguna, por muy aburrida que fuese. - Apoyo su mejilla en la mano algo molesto.

☆〰 Bangtan Café 〰★ [ BTS ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora