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Hoy me han dicho que la felicidad no es gratuita y sólo es una colección de momentos sublimes, mágicos, auténticos, vibrantes e intensos que vuelan y nos dejan un dulce sabor en la boca.

También me han dicho que cuando las expectativas son demasiado altas, más dura será la caída. Nuestros sueños no son alimentados por la razón y el despertar puede ser muy traumático.

Nathional City, principios de Julio

Lena disfrutaba de sus anheladas vacaciones. Había aprobado satisfactoriamente su penúltimo año de carrera. Ansiaba graduarse y encontrar otro trabajo, o bien tratar de progresar en los servicios de limpieza de Nathional City.

Kara no había conseguido que Cat Gran le concediera fiesta. Lejos de enfadarse lo tolero, consciente que había fracasado en la misión entrevistar a Lex Luthor. Era muy probable que aterrara en la ciudad pronto. La fecha seguía siendo incierta. Las órdenes eran claras, estar en guardia para cuando aquello ocurriera.

Winn, ya tenía los sorprendentes resultados de ADN. Se quedo tan perplejo tras leer el informe del laboratorio. Debería contrastar la muestra con la de su madre, para estar más seguro. Eso implicaba hablar con ella. Sería regresar a una espiral de dolor y rabia. Solo tenía fe que aquella revelación sanará un poco las heridas del pasado. Tras finalizar el curso se despidió de la barrendera con afecto y voló hasta Metrópolis.

Brian y Lena habían hecho tan buenas migas, que cogieron la costumbre de salir a dibujar por la calle, o hacían pequeñas excursiones por las zonas próximas a Nathional City. Elisa Danvers se lo agradecía. Últimamente, no se sentía con muchas energías para cuidar de su hijo pequeño.

A la tercera semana de Julio acudiría a unos de campamentos de la montaña, lugar tradicional de la familia Danvers, pues sus hermanas también habían estado. Allí pescaría, realizaría excursiones, actividades campestres y concienciación ecológica. Era la primera vez que estaría lejos de su familia. Estaba muy ilusionado por ello. Kara y Lena lo acompañaron a comprar una mochila, saco de dormir para cuando fuese de acampada, utensilios para comer, toalla, zapatillas y ropa nueva.

- ¿Me llevaréis vosotras al campamento, este lunes?- les pidió mientras se tomaban un helado en el parque.

- ¡Oh, Brian lo siento, pero Lunes me toca trabajar!- se disculpó Kara. Se sentía un poco triste, porque el trabajo le estaba robando tiempo para su familia.

- ¿Por qué no le solicitas a la Señorita Gran fiesta?

- No puedo. Estamos expectantes por la llegada de Lex Luthor a la ciudad y debo de entrevistarlo. Seguramente será este Lunes.- Le acarició la cabeza. Le afectaba verlo apenado.

Lena se paralizo tras escuchar aquel nombre. Dejo de prestarles atención. Viajo en hacia aquel sábado de principios de Mayo, en el cual puso en peligro su estabilidad afectiva. Lex fue el hombre que vio en recepción, antes de subir a la habitación de Max. Lo percibió muy alterado y con muchas ganas de verlo. Subió al ascensor antes de saber si este lo recibiría más tarde, el temor de qué la viera venció a la curiosidad. ¿Consiguió una cita con él al final? ¿Y por qué tenía urgencia en verlo?

A pesar de qué hacía tiempo que no se cruzaban, solía deducir fácilmente cuando estaba cabreado por algo. Y aquella tarde lo estaba. ¿Qué le habría ocurrido con su amigo del alma? Los dos eran muy mujeriegos. Aún así Lex era más caballeroso y muy detallista. Nunca mentía a sus ligues, siéndoles cruelmente honesto. Su lema era nada de compromisos y sólo disfrutar del sexo. Mil veces se pregunto si se había enamorado de alguna de sus aventuras.

La barrenderaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora