Universe [Shawn Mendes]

Attention/ Do, Re, Mi.

Esto es solo de un capítulo, inspirado en la canción de Charlie Puth Attention. Y en la de Blackbear do, re, mi.

Shawn.

—¿Vendrás hoy hermano?—. Termine de abrochar los botones de mi camisa negra mientras que la voz de Max soñaba por el alta voz de mi celular.
—No estoy muy convencido, después de la última vez no tengo ganas de enredarme con alguien más— Pandora brinco al lava manos para conseguir atención.
—Necesitas salir Shawn, tal vez no a enredarte en un culo dulce pero si a beber y bailar, a parte, será en otro club. Es casi imposible que vuelvas a verla—. Acaricie detrás de sus orejas mientras meditaba lo que mi amigo decía.
—¿Y que si quiero topármela?
—¡Shawn!—, gruñó del otro lado de la línea,—¡No puedes seguir aferrado a ella! Aunque no quieras aceptarlo, es una maldita perra. Jugo contigo.
—Te veo a las ocho allá—. Colgué el teléfono y cargue al felino de colores mezclados para sentarlo en mi regazo, este comenzó a ronronear y se quedó dormido.

Tuve que borrar tu teléfono solo para no seguir humillándome.

(...)

Baje de mi BMW frente al club con luces fosforescentes color azul, Max y Robín ya me esperaban dentro. Suspiré mientras pasaba una mano por mi cabello, mostré mi identificación para poder entrar.

—¡Shawn! Dicen que este es uno de los mejores clubs en L.A—, me arrastro entre la multitud de gente bailando hasta llegar a una mesa donde todos estaban, había una chica de cabello café castaño, sus labios eran rojos como cerezas, su piel aperlada y brillante hacia que te perdieras en ella, poseía unas curvas bien marcadas, sus ojos verdes ardían al hacer contacto con ellos—. Ella es Nadia, la conocí en el trabajo, se que se llevarán bien; Nadia, el es Shawn Mendes.
—¿Qué tal Shawn?—nos dimos un corto abrazo acompañado de una sonrisa.

Todos tomaron asiento, hablábamos de cualquier tema, era una buena noche. Tal vez Max tenía razón, necesitaba salir y pasarla bien, Nadie se veía como una buena chica, inteligente, linda, había estudiado mí misma carrera, la química. Todos se levantaron a bailar mientras que yo decidí quedarme sentado revisando algunos asuntos pendientes en mi celular.

—¿No bailas?
—Eh, no gracias, estoy algo ocupado—Nadia tomó asiento a mi lado cruzando sus piernas.
—No pareces ser la persona de la que he odio hablar...
—¿A qué te refieres?—apague mi celular guardándolo en mi bolsillo.
—Llevó un par de semanas aquí en L.A y...sabes, es una ciudad pequeña. Casi todos conocen tú nombre.
—Tengo una grande empresa en un pequeño lugar, tal vez es eso,—me recargué en el asiento—. Pero sigo sin entender, ¿que te contaron de mi?
—Que eres un mujeriego, juegas con las chicas, engañas a tus novias...
—Blasfemias, es obvio que quieren terminar con mi reputación.
—Deberías divertirte, esa chica del vestido rojo no ha dejado de mirarte toda la noche...—palmeo mi muslo causando cierto cosquilleo, se levanto y fue a la pista.

Mire donde Nadia había indicado. Esto tiene que ser una jodida broma. ¿Que hace ella aquí? La vida está en contra mía, siempre hace realidad las cosas que más odio, ¿por qué no hiciste real a Batman cuando me hacían bullying en la escuela? ¡¿Eh!? Debo calmarme. Le deje un mensaje a Max diciéndole que me retiraría temprano, salí del club y arranque directo a mi departamento. Prefería quedarme con Pandora viendo películas en Netflix. Abrí la puerta y su cascabel resonó por toda la habitación, lo cargue mientras me quitaba la camisa quedando solo en la interior. Antes de que pudiera ponerme cómodo alguien tocó la puerta, la abrí e inmediatamente desee no haberlo hecho.

—¿Qué estás haciendo aquí?—portaba un bello vestido color rojo, cuando su cabello se meneaba no podía evitar recordar su perfume, cuando al tenía entre mis brazos, antes de darme cuenta que ella no valía la pena.
—¿Puedo pasar?—lo medite unos segundos hasta que cedí y me hice a un lado para que ella entrará.
—Quiero creer que no eres la persona que ha estado hablando pestes sobre mi...
—Yo...lo siento. Estoy muy arrepentida, enserio no sabía de lo que me estaba perdiendo.
—¿Cómo sabías que yo iba a estar ahí?
—He estado buscándote...
—¿Haz estando llenado a cada club de la ciudad solo para simular que toparte conmigo sería pura casualidad? Patética.
—Shawn, se que aún sigues sintiendo algo por mi, yo también. Enserio perdóname.
—Eso dijiste muchas veces en el trabajo, pero nunca venias en las noches conmigo... ¿dónde estabas? ¿Eh?— podía en ver en sus ojos la mentira, ella solo estaba jugando conmigo. De nuevo.
—Estaba ebria no sabía lo que hacía...
—¿Ebria todo un mes? ¿Y siempre caías en la misma polla?
—No tienes porque hablarme así. Por favor...perdóname.
—¿sabes? Si pudiera volver mal día en el que te conocí...—me acerqué lo suficiente para rozar nuestras narices, una sonrisa de Victoria se dibujó en su rostro,— creo que mejor me quedaría en cama. Vas por la ciudad hablando demasiado, diciendo mentiras.
—Estaba enojada, ¡nunca fue mi intención!
—Quebraste todos los vidrios de mi Ranger Rover cuando te termine.
—Sabes que te lo merecías, ¡no tenías derecho a dejarme!
—¡Te cogias a mi amigo todas las noches que yo te esperaba en casa! Me hacías levantarme todas las mañanas sintiéndome incompetente. No tienes ningún derecho de reclamar, te enviaba regalos, te trataba como una dama. Pero ese fue mi error, trataba como una dama a una zorra—la palma de su mano chocó contra mi mejilla.
—¡Cállate! ¡Shawn yo te amo!
—Tú solo quieres atención, no quieres mi corazón.
—Necesitas entender...—tomó el cuello de mi camisa, su respiración choco contra mis labios, estos se unieron dejándome sentir el sabor a fresa que en algún momento fue mi favorito. En algún momento. No más. Me separé bruscamente de ella.
—Y últimamente me tienes pensando, estás loca. Nada de lo que yo te daba era lo suficientemente bueno para ti.
—¿Quién era la chica con la que estabas?—empujó mi pecho.
—¿Es por eso? Tu odias pensar en mí con alguien más.
—Ella no te va a dar lo que yo te di, Shawn. Soy una mujer de tu talla.
—Sí, solo quieres atención, una mujer de mi talla se respeta. Solo te estás asegurando de que nunca supere lo nuestro.
—¡¿Como pudiste dejarme!?—podía ver el rencor en sus ojos, la ira brotaba por sus venas, ¿qué me estás haciendo?—dame una oportunidad más...
—No, se lo que pasará después. Tú no sabes lo que es amar, lo que es estar con una sola persona, Zapatos de diseñador y píldoras de Xanax, cumplidos, tu bolso de maquillaje. Nunca tuviste que pagar por tu propia bebida. Porque todo el mundo quisiera tocar ese culo en algún momento.
—¿¡Como puedes estar diciéndome todo esto!? ¡Pensé que me querías!
—No pienso darle amor a alguien que no lo merece.
—¿Qué estás tratando de decirme?
—Estoy tan cansado de ti, Clarie. Tan cansado de todos los juegos que juegas. No soy el juego del gato. Tú y yo no mantenemos ningún tipo de relación, no ahora. Ni nunca.
—No puedes estar hablando enserio...
—Sal de mi departamento...—abrí la puerta sin despegar mi vista de ella.
—Shawn...
—Adiós Clarie—lagrimas falsas caían de sus ojos acuosos, está solo apretó su bolsa y salió. Cerré la puerta y me tire sobre el sofá.

Mi teléfono marco un mensaje nuevo.

Desconocido.

+099 89 3456 7832
Hey, soy Nadia.
¿Quieres quedar mañana?

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Woooo, weno este fue el primero, los que no tengan por ejemplo {000} sig indica que solo será de un capítulo, por ejemplo este.

Tengo un raro crush con Blackbear. No sé si es gay, bisexual o hetero ._. Aiuda.