Universe [Shawn Mendes]

Be My Daddy. |000|

Capítulo inspirado en Be My Daddy de Lana del Rey. Comenta si el vídeo te dejo pendeja también.
Diferencia de edades muy Grande. Ella 14 el 24. Weno no tan Grande, le había puesto 34 but cambie de opinión.

Papá había decidido irnos de vacaciones, desafortunadamente no podía ser un viaje en familia normal ya que sus amigos también están con él. Tome mi celular y coloque los audífonos en mis oídos mientras masticaba mi goma de mascar. Mamá me había dejado pintar mis labios de un bonito color cereza, coloque mis lentes de Sol redondos y me recosté en la arena, esto era muy relajante. Papá venía en otro vuelo con todos sus compañeros así que aún no llegaba. Todo estaba tan tranquilo, la música era maravillosa, amo la música, no podría vivir sin ella, hice una gran bomba de fresa y esta fue explotada pos alguien, me senté en la arena y quite mis lentes viendo que mi padre había llegado y con el, la bola de sus amigos.

—Levántate y saluda...—. Rodee los ojos y me levante, todos eran horribles. Ninguno podía cumplir mi sueño de tener un sugar Daddy, estoy obsesionada con ellos, todos ricos y guapos, tan elegantes y perfectos. Odio salir con chicos de mi edad, ellos no entienden nada. No me gusta alguien a quien manipular. Quiero que alguien me manipule— Olvidaste saludar al señor Mendes...—otro viejo, me giré inflando mi goma de mascar, al verlo en su traje de baño, con esa piel blanca, sus abdominales y alguno que otro tatuaje me fue imposible no violarlo con la mirada. Camine a paso lento, simplemente esto era lo que siempre había querido. Me frene al ver como untaba el protector solar por todo su cuerpo. Dios santo.
—¡Hola!—toque su hombro y este se giró de inmediato, sonrió, que hermosa sonrisa, preciosa, bien hecha, pásenme el número de su ortodoncista.
—Hola, tú debes ser la pequeña Skylar. ESTA SONANDO MAKE DADDY PROUD CHAMA.
—Tengo catorce...—cruce mis brazos—, casi quince.
—Ya veo...—en ese momento la inocencia que había visto en el se desvaneció, comió con la mirada cada parte de mi cuerpo. Tengo 14 estamos en el 2017 toda la comida tiene más hormonas que las hormonas, mis pechos se desarrollaron muy rápido y el trasero siempre lo he tenido.
—Seguiré tomando el sol, señor Mendes...—volví a reventar mi bomba de chicle y baje mis lentes, camine hacia mi toalla recostándome de nuevo. Su mirada estaba en mi, eso me gustaba. Creo que lo deseo.

(...)

—¡Atrapa la pelota!—corrí lo más rápido posible y la tome entre mis brazos.
—Chicos creo que es hora de ir a cenar, ¿todos traen su ropa?
—No pensé que fuéramos ir a cenar...—me removí en la arena—deje toda en el hotel.
—¡Skylar!—gritó mi madre.
—Cariño, no te preocupes, Shawn tampoco trajo la suya, pueden ir juntos y los veremos en el restaurante—mi madre rodó los ojos y me tendió la tarjeta de la habitación.

Tomamos nuestras cosa y fuimos hasta la avenida para tomar un taxi que nos llevará al hotel. Me molestaba que se hubiera puesto la camisa, me gusta ver su espalda, es tan, ufff.

—Tienes arena en el trasero—su comentario me tomó por sorpresa y mi cara enrojeció.
—Y seguro tú tienes en las bolas—arqueo una ceja divertido, un taxi se estacionó frente a nosotros.
—¿Quieres comprobarlo?
—Que atrevido, ya veremos llegando al hotel...—entre al taxi sin dejarlo responder, subió a mi lado cerrando la puerta. Retire mis lentes y saque de mi bolsa otra tira de goma de mascar.

Nuestras piernas se rozaban, hacían una fricción que hacía palpitar mi zona, giré mi cabeza para mirarlo, tenía dos lunares alienados en su cuello como su un vampiro lo hubiese mordido. Su mandíbula se marcaba perfectamente, quería tocarla, besarla, morderla. Se giró meneando así sus rizos, me vio y sonrío, le explote mi bomba de chicle en la cara y este se quejó. Hice como si mis dedos fueran dos piernas y los encamine hasta su muslo, con mi palma apreté este, su cara era digna de una foto, estaba sorprendido y excitado a la vez. Masaje su muslo por la parte interna hasta ver cómo algo si iba inflamando dentro de su traje de baño, era más notorio ya que no llevaba ropa interior, se lograba ver lo gruesa que era. Cerré la ventanilla del taxi para que este no pudiera ver nada, puse mis rodillas a los costados de su cadera y enrosque mis brazos en su cuello; saque la goma de mascar de mi boca y la envolví en su papel para meterlo en mi bolsa.