Yo sabía que me amabas, lo demostrabas cuando estabas conmigo, pero, Tyler tenía el derecho de besarte, agarrarte, demostrarle al mundo que eras suya.
Sin embargo, era yo quién te reunía las mariposas en el estómago, quién te acariciaba la piel como si de una obra maestra se tratase, quién conocía cada espacio de tu cuerpo...quién te amaba de verdad.
¿Por qué él se ganaba la mejor parte, si yo era quién en verdad amabas?
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Cartas al Olvido
Short StoryDime amor, ¿donde estás que no te encuentro? Todos los derechos reservados ©