Capitulo 2

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- ¡Shin-chan!

Pensé que me había deshecho de él, pero me temo que me equivoque, a veces me pregunto porque ando con alguien tan gritón.

-Oha- asa, ayúdame por favor.

- ¿Por qué huyes de mí, Shin-chan?

-Eres ruidoso, Takao.

-Que malo eres, pero como sea eres un tsundere no puedo cambiarte. ¿Ya viste a tu novia?

- ¡Que no es mi novia! Es solo una niña que me acosaba en la secundaria.

-Sí y que te encantaba, pero la rechazaste por tsundere.

- ¡No soy un Tsundere! –Dijo irritado el megane.

-Como digas Shin-chan, y ¿qué es lo que harás ahora?

-Esconderme.

Takao me estuvo reprochando y burlándose de mi con mi último dialogo que según yo lo había pensado. Aun puedo recordar ese momento, admito que fui un poco cruel pero no soy una persona muy sentimental, hasta estoy pensando que Takao está en lo correcto al llamarme "Tsundere".

-Midorima-senpai, usted me gusta mucho. Exclamo la pequeña chica con pena y viendo hacia el piso.

-Fuera-nanodayo. Expreso él viendo hacia un lado.

- ¿E... Eh?

- ¿Eres sorda?

-Por supuesto que no, perdón por quitarle su tiempo, si me disculpa. Hizo una inclinación y se fue corriendo.

Y esa fue la última vez que se me acerco, había algunas veces que la veía, pero nunca cruzamos palabras porque ella siempre me evitaba. Si veníamos por el mismo pasillo ella se metía a un salón cualquiera para evitarme, incluso puedo recordar una ocasión en la que se metió al baño de varones, esa acción me hizo darme cuenta que en verdad el deje muy mal, pensé disculparme con ella, pero algo no salió muy bien...

Fui un completo estúpido...

-Oye. El peliverde la llamo.

- ¿Si, senpai? Pregunto la chica con timidez.

-Deja de ser una niña, y actúa como una persona de tu edad.

- ¿A qué se refiere? Pregunto confundida.

-Deja de actuar como una completa tonta cuando vamos en la misma dirección. Respondió el megane con mucha frialdad.

La chica en ese momento corrió llorando demasiado desconsolada, ella solo pensaba en evitar ser una molestia porque aun lo seguía queriendo, pero él no necesitaba ser así de cruel.

Ahora ella estaba aquí en Shutoku y tengo la posibilidad de disculparme con ella, pero no sé si ella quiera verme. ¡Vamos Shintarou! Eso no puede ser más difícil que el baloncesto.

O eso pensaba el peliverde.


De nuevo tú. - Midorima Shintarou.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora