4: Narración

130 12 0
                                    

Algo muy común que he notado es que muchas veces los escritores tienen problemas a la hora de narrar una historia.

En la vida hay dos tipos de escritores:

1) Los que narran sus historias desde un punto de vista en tercera persona.

2) Los que narran sus historias como si formaran parte de la trama, tal y como un personaje mas.

En el caso de los primeros algo que puede resultar útil es una narrativa en pasado.

¿Recuerdan aquellas clases de castellano en las que se trataba el pasado, presente y futuro? Bueno, en este caso eso es aplicable.

Ejemplo:

Caminó con cuidado, hasta llegar al pie de las escaleras, sentía el piso frío bajo sus pies descalzos y no pudo evitar preguntarse si lograría salir con vida de aquél lugar.

Para el segundo caso tenemos a los que narran como si formaran parte de la historia.

Para este caso seria algo como esto:

Caminé con cuidado, hasta que llegué al pie de las escaleras, sentí el piso frío bajo mis pies descalzos, entonces no pude evitar preguntarme si lograría salir con vida de este lugar.

Ambas maneras funcionan, tienen su propio estilo y son prácticas, simplificando mucho el texto y ayudando tanto al escritor como al lector a tener una mejor comprensión lectora.

Sin embargo algo importante es saber elegir las palabras adecuadas a la hora de narrar, un error muy común es este que les presentaré a continuación:

Fui a la cocina y me preparé un sándwich de atún, me gusta mucho el atún, pero no me gustan las sardinas, en fin, eso no viene al caso, agarre el sándwich y me lo comí, entonces recordé que debía llamar a Laura para una tarea, que fastidio, yo quería ir al cine.

Ese es un caso en el que vemos, no solo una gran redundancia, sino también un texto con muchas cosas mezcladas y además de algunas totalmente innecesarias para el lector.

Pero (siempre hay un pero ¿no?) muchas personas deciden escribir de esa manera, y no es que este mal, pero aquel ejemplo por lo general es lo que vemos como nuestro primer borrador.

Siempre, siempre, debemos hacer un previo borrador a la hora de escribir, no solo publicar la primera cosa que se nos presente a la mente.

Sin embargo muchos de los escritores que nos encontramos hoy en día en las plataformas digitales son niñas (y niños) de trece años o incluso menos, los cuales necesitan ayuda y que sin embargo suelen molestarse o deprimirse cuando alguien les hace alguna corrección, por lo general de los tan conocidos beta-reader.

Por supuesto, hay quienes deciden hacer esa corrección de manera ofensiva hacia el escritor y eso es algo que, definitivamente no apruebo en ninguno de los casos.

Nadie es perfecto, todos somos humanos y si queremos ayudar a alguien entonces hagamoslo con paciencia y amabilidad.

Guia básica para escritoresDonde viven las historias. Descúbrelo ahora