20 de septiembre 1943
¿Cómo he llegado a este punto? De ser una humilde chica de ciudad, a estar encerrada en un edificio con miedo a que me pueda llegar una granada, a diferencia de lo que muchos puedan pensar no soy una civil, soy una orgullosa soldado del ejercito rojo... Bueno mejor dicho una ex orgullosa no por el hecho de que probablemente muera, sino porque ya no estoy del todo orgullosa.
Ahora solo estoy aquí pensando como era mi vida antes, mientras no me atrevo ni a asomarme. Solo tengo mi fusil en mano por si alguien se acerca, quizás soy solo una cobarde, si alguno de mis camaradas superiores me viera ahora mismo probablemente me ejecutaría por cobardía, sin embargo si salgo a pelear probablemente no dure ni un segundo, he combatido en varias batallas, pero esto... es horrible.
El frio del ambiente me alegra en cierta medida, me recuerda a mi niñez, cuando vivía en las afueras de Moscú podía sentir el dulce frio mientras mi madre mi abrigaba o cuando jugaba con mi hermano a arrojarnos nieve y luego íbamos con nuestros camaradas a compartir relatos en medio del fuego todos cantando juntos, sea ucraniano, judio, asiatico,etc. Eso no importaba se podía respirar el aire de camaradería y ayuda entre nosotros, se podría decir que era muy feliz. La comida no era abundante pero eso poco importaba ya que nos teníamos los unos a los otros. Y ahora ¿Qué tenemos? Si retrocedemos nos disparan...
Voy a seguir divagando mejor, da igual el resultado probablemente termine muerta de todas maneras, al menos si voy a morir, que sea recordando como llegue a este punto.
16 de abril año 1933
Es mi cumpleaños acabo de cumplir 10 años estaba con mis mejores amigos en mi humilde casa en moskva, estaba tan feliz. Mis amigos me trajeron regalos muy bonitos como una Matrioshka o ropa muy bonita aunque claramente humilde. Aunque me entristeció que no haya pastel, al igual que el año pasado no hay comida, me gustaría tener más comida para compartirla con mis amigos. Pero mis padres me dijeron que no se puede por el clima que arruina la comida.
La Matrioshka me lo dio un chico de origen ucraniano llamado Bohdam, era muy amable, gracioso y lindo conmigo. Lo considero mi mejor amigo, me gusta jugar con el en la nieve y de vez en cuando ir a su casa a escuchar las historias de guerra de su padre.
Son muy interesantes las historias de guerra, especialmente las de la guerra civil. Me encanta saber como los héroes rojos derrotaron a los malvados blancos de la mano del gran Lenin. La guerra suena como algo muy heroico, me encanta la paz en la que vivimos pero mi padre me a dicho que aún hay enemigos afuera.
Me gusta ir a la escuela, aunque no van tantas mujeres por alguna razón. Ahí nos enseñan acerca de matemáticas, historia y a escribir. Me siento contenta porque aprendí a leer desde muy pequeña y se me hace fácil entender ciertos libros que hablan de la lucha del trabajador aunque algunos usan palabras muy complejas y no las entiendo.
Además de Bohdam me gusta jugar con mi hermanito menor Motka, el es muy travieso pues a veces le tira piedras a los otros niños tiene muy buena puntería a pesar de tener solo 7 años. Aunque mi Madre lo regaña ya que eso no lo hace un hombre de bien a sus camaradas. Mi hermano solo agacha la cabeza y hace un puchero.
La verdad a pesar que a veces paso frio, hambre y que mi padre se la pasa todo el día trabajando en la fabrica de tractores soy una chica feliz, me encanta mi país, me encanta tener amigos y jugar con ellos, además que cuando voy a sus casas sus padres me atienden amablemente y en algunos casos me hablan de cosas de otras culturas como los ucranianos, belorrusianos, judios y musulmanes. A mi Papá no le gustaba mucho que hablara con los judíos y musulmanes porque el me dice que esas cosas no existen y solo son mentiras contra el pueblo. Yo no creo que sea verdad, solo me interesa mucho las historias como si fuera un cuento.
Todo era perfecto, pero unas semanas después me hablo mi amigo Bohdam, el muy triste me dijo que tenía que irse a Ucrania, yo le respondí:
- No tienes que irte amigo, quédate conmigo y nuestros amigos, si quieres convenzo a mi mamá que vivas con nosotros, podemos seguir jugando y riendo- Dije mientras me salían algunas lagrimas
El soltó una lagrima y me dio un beso en la mejilla
-Lo siento, no es decisión mía sino de la madre patria, te escribiré y algún día podremos vernos de nuevo- Dijo mientras se le quebraba la voz.
De repente apareció su padre y tomo a Bohdam de la mano y se lo llevo, yo solo me quede mirando como su figura se alejaba en medio de la nieve, no pude evitar llorar e ir a abrazar a mi mamá, ella me consolaba pero no podía parar de llorar.
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La hoz y el martillo
Historical FictionEsta es la historia de una chica llamada Katyusha, que se enlista en la guerra para detener el avance Aleman ¿Como ayudara esta chica en la segunda guerra mundial?