Preocupación

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Yo desperté, el entrenador Yurik, seguía con eso de aprender a mejorar la puntería, estábamos 10 horas entrenando puntería. Yo estaba mejorando mucho, aunque mi hermano era mucho mejor que yo, Vladimir también mejoro, me hice amiga de él, aunque claro todos éramos camaradas. Yo usaba la ametralladora ligera Degtiarov. Se me hacía muy fácil usarla, aunque mi hermano la usaba mucho mejor, a pesar de que no tenía una condición física tan buena como la mía, tenía la mejor puntería después de Vladimir. Fueron semanas difíciles, pero al final lo logramos, nosotros que éramos 30 en nuestro entrenamiento, seriamos nombrados soldados oficialmente. El entrenador Yerik hizo un discurso.

Yerik: Escúchenme, a pesar de que unos fueron mejores que otros, ustedes camaradas, son ahora oficialmente soldados de la gran Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas, ahora irán y sacarán a esa escoria fascista que está atacando nuestra gran madre patria, con nuestros tanques y soldados los destrozaremos.

Todos nos emocionamos con esas palabras, al parecer por fin podremos ver los resultados de nuestro entrenamiento. Habían comentarios como.

Hombre: Por fin, mataremos a esos invasores.

Yo pensaba lo mismo, pero muy en el fondo quería llegar a una solución pacífica, pero por la actitud de los fascistas sabía que eso no iba a ser posible.

Yerik: Bien, ahora ustedes serán enviados a luchar. Ellos han tomado los sectores de Bielorrusia y las repúblicas bálticas.

Yo quede impactada, ¿Tanto habían avanzado?, esto era increíble. Al parecer su ejército era muy poderoso, aun así, nuestro territorio es muy basto, así que igual los derrotaremos, además de que tenemos al camarada Stalin, él sabrá que hacer.

Yerik: Muy bien, desde ahora se dirigirán a Moscú para que ahí un les asignen alguna división, recuerden ustedes tienen que defender la madre patria. Ahora vayan.

Todos: ¡Si señor!

Luego de eso, yo estaba empacando mis cosas para irnos, la verdad siento que mejore pero no tanto, mi hermano Dimitri seguía igual, pero había obtenido una personalidad nueva. A mi parecer lucia más serio. Entonces yo le dije.

Katyusha: Dimitri, ¿Estas bien?

Dimitri: La verdad, tengo miedo...

Katyusha: ¿Miedo de que?

Dimitri: De luchar, Katyusha ¿Tu no?

Katyusha: Claro que no el Camarada Stalin, confía en nosotros eso me da fuerzas.

Dimitri: Puede ser, pero aun así han avanzado mucho, esto me hace preguntarme, acaso ¿Ganara el mal?

Katyusha: No pienses en eso hermano, en este mes nos hemos preparado muchísimo, para eliminar a los fascistas, y recuerda los malos siempre pierden, como paso con el malvado zar.

Dimitri: Puede ser...

En ese momento escuché que alguien se acercaba así que terminamos la conversación, resulta que era Velerik, yo creí que iba a empezar a acosarme de nuevo.

Velerik: Oigan, les quiero decir que solo faltan ustedes, así que apresúrense.

Katyusha: En un momento terminamos.

Entonces Dimitri y yo nos apuramos, y nos fuimos. Nos llevaron en un camión hasta Moscú, de repente Dimitri dice.

Dimitri: Miren.

Ahí vi a los valientes soldados del ejército rojo, en sus T-50 y los KV-2, y otros iban por tierra eran muchos la verdad, nosotros los mirábamos con gran admiración excepto Vladimir, por alguna razón sentía que ocultaba algo. Como sea, a mí no me importaba mucho, yo seguía apoyando a los soldados del gran ejército rojo. Pasaron 3 horas, y por fin llegamos a Moscú, ahí había muchas divisiones. Luego un soldado llego y nos entregó unos papeles.

Vladimir: ¿Qué es esto?

Soldado: Son sus divisiones, ahora camaradas diríjanse a donde les toco.

Yo compare con mis compañeros, al parecer me había tocado con Vladimir, Velerik y otros soldados de mi escuadrón, pero no con mi hermano.

Katyusha: Disculpe camarada ¿No me podría cambiar de división?

Soldado: Lo siento, son órdenes directas de los comandantes.

Katyusha: Pero mi hermano está en una distinta, y me preocupa lo que le pueda pasar.

Soldado: Lo siento, ordenes son órdenes.

Me sentí algo enojada, ya que quería estar en el mismo escuadrón que mi hermano, además que yo juré protegerlo, aunque bueno él es más hábil usando armas que yo, así que deberá estar bien, pero tenía un mal presentimiento de esto. Pero las ordenes de los comandantes son incuestionables, así que, aunque enojada me resigne a no insistir. En ese momento Dimitri me toca el hombro y me dice

Dimitri: Katyusha ¿Puedo hablar contigo un momento?

Katyusha: ¿Eh? Claro

Vladimir: Katyusha, apúrate tenemos que irnos.

Katyusha: Ve, yo ire después.

Vladimir: Esta bien, pero no me hago responsable por lo que te dirán.

Dimitri: Eres mi hermana mayor, a pesar que hemos tenido nuestras diferencias siempre nos hemos llevado bien, incluso entraste al ejército por mí, no sabes cuánto aprecio eso. Pero siento, que he vivido muy poco.

Katyusha: ¿Por qué me dices esto?

Dimitri: Creo que esto es una señal, de que nunca más nos volveremos a ver.

Katyusha: No seas tan negativo, recuerda que estas en el ejército rojo.

Dimitri: ¿No entiendes? Esos alemanes, han acabado con varios soldados, sin problemas son muy poderosos, y a mi división nos enviarán primero que, a la tuya, nos harán ir mañana. Y probablemente muera en batalla. Tengo miedo, y por eso te digo esto como una posible despedida.

En ese momento lo mire a los ojos, y le veía su preocupación en verdad estaba asustado. Pero yo me enoje un poco por su pensamiento negativo.

Katyusha: No morirás, eres una persona muy hábil usando armas, así que mataras muchos nazis, eres mucho mejor que yo en ese aspecto, además apuesto que después de que los derrotes volverás riendo y celebraremos.

Dimitri me miro, y me dijo.

Dimitri: Ojalá sea, así como sea. Adiós Katyusha.

Mientras él decía eso, se le veía una lagrima, yo también me fui muy apenada, no quiero que nada le pase aun así estaba segura que no moriría, o bueno al menos eso creía. Luego fui al lugar que el papel decía, y ahí había muchos tanques y soldados, yo busque a Velerik o a Vladimir, hasta que los encontré.

Velerik: Por fin viniste ¿Qué paso?

Katyusha: Nada importante...

La hoz y el martilloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora