¡Corre! Es amor | вaeĸyeol |

Capítulo 8

El regreso fue silencioso, la incomodidad de ambos se notaba a kilómetros de distancia. ChanYeol se mantuvo caminando por la dirección que acostumbraba ya que supuso que este iba por aquel sector luego de que tuvieran aquel pequeño encuentro el primer día de clases. Todo seguía en calma hasta que BaekHyun le susurró.

Bájame aquí, yo puedo seguir solo. 

-Ante  esto, el chico más alto, bajo al contrario con cuidado de su espalda para así ahora volverse y quedar frente a él, entregándole su bolso-. ¿Seguro? Puedo llevarte hasta tu casa si deseas, no tengo problema.

Dije que hasta aquí.

Pero, puedes volver a desmayarte –comenta ChanYeol un tanto preocupado por el contrario, mientras tanto este mostraba indiferencia ante el tema-.

¿Por qué te preocupas tanto por mí? Ni siquiera me conoces.

No es eso... Lo digo porque estas muy débil, nada mas. 

BaekHyun miro por última vez al contrario antes de darse la vuelta y comenzar a caminar por un callejón algo cojo por la debilidad de sus piernas. Avanzó unos cuantos metros, cuando cayó de rodillas al piso nuevamente, por lo que al ver esto, ChanYeol se acercó rápidamente al chico para poder ganarse de cuclillas y mirarle mejor-.

¿Estás bien? ¿Te golpeaste muy fuerte? –Cuestiona tomándole por los hombros para así poder levantarlo, pero de inmediato BaekHyun le separó de un empujón-. 

¡Aléjate! Déjame solo, yo puedo –con cuidado trata de levantarse de su lugar para así poder seguir caminando, pero la mano de ChanYeol atrapó el brazo más cercano adverso para poder detener su escape-. 

¡Ya basta! Deja de ser tan orgulloso y pensar que puedes hacer todo por tu cuenta –antes de que su contrario pudiera responderle, le tomó estilo princesa, sujetando lo mejor posible las cosas que tenía en una de sus manos para que nada se cayera, asimismo para que BaekHyun no pudiera zafarse tampoco, caminando por la dirección que lo estaba haciendo el ya mencionado anteriormente. 

El silencio nuevamente se hacía presente mientras ChanYeol trataba de ubicarse de donde estaba y así preguntar poco después al contrario.

¿Dónde vives? Dime cuál es tu casa.

No te lo diré, déjame aquí. Puedo llegar bien desde aquí –murmuraba un resignado BaekHyun, tratando a toda costa de evitar la mirada al chico alto sobre si-. 

Claro que no. Dijiste eso al comienzo del callejón y a pocos metros caíste, así que dime. –demanda ChanYeol mirándolo aunque este no quisiera hacerlo-. 

BaekHyun dejó escapar un suspiro y señaló la última casa a la derecha de aquel callejón. ChanYeol se incorporó rápidamente y se dirigió hasta el lugar mencionado por su adverso con una pequeña sonrisa al ver que este le estaba dejando ayudarle.

No fue mucho lo que demoraron en llegar hasta la casa que había señalado el contrario, por lo que al estar ya frente esta, comenzó a mirar cuidadosamente. Era una casa muy simple de solo un piso, se veía algo maltratada pero en condiciones para vivir en ella. Tan pronto cuando sintió al chico removerse en sus brazos, lo bajo con cuidado ahora mirándolo a él.

¡Listo! ¿Ves que no me costaba nada? –Cuestiona un ChanYeol sonriente a la par que BaekHyun se acercaba hasta la puerta principal con un paso lento para no volver a caer por sus torpes piernas-.

Como digas. Ya puedes irte. –Murmura abriendo la puerta sin voltearse siquiera para despedirse y así entrar a la casa dejándolo hablando solo-.

Espe... –no alcanzó a mencionar nada por la actitud del adverso, ahora resoplando parte de su flequillo y bajando su mirada, notando que no le había entregado sus medicamentos al chico, por lo que ahora se acercó hasta la puerta para tocarla-. ¡BaekHyun, tus medicamentos! –dio unos cuantos golpes a esta pero sin lograr que el contrario asomase aunque fuese la nariz, por lo que no le quedó otra que dejar los medicamentos frente a la entrada y poder retirarse posteriormente-

¡Cuídate y toma tus medicamentos! –dijo lo suficientemente alto para que pudiera oírle antes de observar una última vez la casa de BaekHyun, para ahora caminar por el callejón hasta la salida de este.
BaekHyun por su parte en todo momento se encontró escuchando las palabras adversas del otro lado de la puerta. Al ya no escucharle más, se acercó hasta la ventana para poder verificar si el contrario ya se había ido. Al no ver rastro de este, soltó un suspiro y lentamente se dejó caer en el frío piso de aquella casa, ahora abrazando sus piernas a la par que cerraba sus ojos, mientras por su mente pasaban leves imágenes de lo  ocurrido en el tarde junto a aquel chico. 

¿Por qué? –Se cuestiona asimismo apoyando su frente en sus rodillas mientas miraba la soledad de su casa consumirle por completo, dejando de lado su arrogancia y pareciendo más que un pequeño niño ahora-. No sucederá... no dejaré que vuelva a suceder... 

No otra vez...

ChanYeol había llegado al fin a casa. Estaba más que agotado por lo vivido durante el día, siendo un suceso tras otro. Su cuerpo al fin dejaba caer sobre su cómoda cama para ahora dormir hasta el día siguiente, la verdad es que ni el apetito le podía ganar ante las inmensas ganas de querer dormir hasta más no poder, pero a pesar de esto, aún rondaba en su mente las palabras mencionadas tanto por la enfermera, como BaekHyun. ¿Por qué razón se habrá puesto tan nervioso cuando supo que estaba en la enfermería, o cuando la enfermera mencionó sobre sus moretones? Había algo que estaba ocultando y no parecía ser muy bueno. De igual manera el comentario por parte de BaekHyun que más rondaba en su cabeza, era:

¿Por qué te preocupas tanto por mí? Ni siquiera me conoces.

Ahora que su consciencia se encontraba más tranquila, esta frase se repetía a cada instante, lo que le hizo cuestionarse, ¿cuál era la razón por la cual le importaba tanto lo que le pasara a ese chico? Cada vez que lo veía sentía una extraña sensación comprimirle el estómago, como si ya lo conociera de antes, o de haberlo visto en alguna ocasión, pero su único problema es que olvidaba las cosas muy rápidamente, excepto cuando era algo demasiado importante para él, pero el caso de BaekHyun  ya le comenzaba a preocuparle.