Viviendo con mi enemigo -Editando-

Palabras duras y una propuesta para el futuro

<Castiel>

Así es me tocaba a mi narrar esta vez, veamos con que empezamos, lo tengo que tal con esa tarde cuando saque a pasear a demonio

Estaba el día soleado, según las personas un día hermoso para salir y pasearse por ahí al lado de la persona que amas y te corresponda, tomados de la mano muy felices, pero no para mí, ese tipo de días son perfecto para quedarme dentro de mi casa en mi cuarto a componer más canciones, oh eso era mi plan para este día cuando llego demonio con su correa en el hocico, ya sabía cómo acabaría esto.

-oh no, justo ayer te saque a pasear, dejadme ensayar hoy un día tan alegre y bla bla bla-

Su respuesta de mi perro fue un ladrido, después tomó de mi pantalón y mordió para sacarme de la cama.

-demonio, ya te dije que no-

Pero no se rendiría y eso ya tenía que saber, después de varios años a lado de este perro.

-venga tu ganas- dije mientras dejaba mi guitarra y me calzaba mis tenis, tome su corres y lo amarre para después salir por la puerta (no castiel salte por la ventana) de la casa y cerrar bien, comen e a llevarlo por la calle al parque para que se relajara y regresaremos lo más pronto posible a casa para terminar con lo que hacía.

***

Fue algo de tiempo el que nos llevamos de la casa al parque pero llegamos, y en cuanto demonio lo noto comenzó a desesperarse.

-aguarda, solo deja te quito esta correa y podrás...- no pude terminar de hablar pues ya le había quitado la corres y este ha había salido corriendo por los alrededores, yo solo le veía mientras guardaban la correa y me adentraba más al parque como él lo hacía.

Me senté al pie de un árbol que estaba cerca mientras le vigilaba que no se largara más lejos, hasta que de un momento a otro por descuidarle solo un momento por mirar mi celular y responder un mensaje de lysandro, ya no le veía cerca, me levante y comencé a buscarle.

-demonio-

Comenzaba a llamarle mientras me movía de lugar en lugar, hasta que pare en cierto lugar, donde le vida sobre alguien le silbe, este en respuesta vino hacia mí, me acerque hasta la persona, demasiado cerca de él estaba y no evite el reír cuando note como se sonrojaba, Nathaniel sonrojado, incluso con esa faceta me gusta verle.

-¿interrumpo algo?, quizá una declaración de amor delegada- menciono en cuanto me levanto de aquella posición, no tenía nada contra la delegada, bueno a quien engaño claro que tengo algo contra ella y el odio se hizo más mutuo en cuanto ambos hablamos que a los dos nos unía algo, y era el mismo gusto hacia la misma persona, por eso cuando Nathaniel y esa chica comenzaron a salir; solo sentía hervir la sangre cada vez que les veía juntos.

Me satisfacía saber en ese tiempo, cuando dejaron de ser pareja por ciertos motivos, justo después de la llegada de mi ex.

Mire a la delegada y esta solo me miraba con odio, seguido de esa mirada se retiró dejando me como todo un campeón, pero mi atención no duro por siempre en mi victoria, se desvío a Nathaniel quien había soltado un suspiro al dejarse caer sobre la banca.

-¿qué ocurre delegado?, ese suspiro se oye como si se te fuera el alma- dije en un tono algo burlón, solo quería acabar con la situación tensa.

-estoy harto castiel- dijo levantándose y apuntándome con su dedo índice tocando a la vez mi pecho- a fuerza todo tiene que girar a tu alrededor, me molesta tener que verte a cada lugar que voy, me molesta que solo hables las cosas sin pensar y sin ningún tacto, porque no solo desapareces-