Capítulo 7

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Una gata rayada se restregaba en los pantalones de cierta rubia

-Por cuarta vez Meredith, no te voy a dar de esto. Estás a dieta, recuerdalo- Le decía Taylor con tono autoritario; Meredith solo soltó un maullido -Eso no funciona conmigo y lo sabes- Taylor seguía removiendo alguna salsa en la estufa; Meredith comenzó a ronronear y pronto se trepó en la silla de la barra de desayunos para ver a Taylor con la cara más tierna y suplicante que su alma gatuna le concedió -Basta Meredith Grey Swift, no vas a obtener absolutamente nada de esto- La señaló con la cuchara llena de aquella salsa, que Meredith tenía que decir... olía maravilloso. Pronto sus ojos solo tenían un objetivo -Meredith, ni se te ocurra- Pareciera que Taylor leyera mentes, pero eso no bastó; Meredith salto desde la silla hasta tomar con su boca aquella pala impregnada de salsa, y tal vez aquel deseo de ser más regordeta la llevó a caer directo sobre el lavabo de platos, el cual estaba que rebosaba de agua, perdiendo así su oportunidad de saborear aquel cucharón. De un sobresalto salió como alma que lleva el diablo directo y sin escalas a su escondite... debajo de la cama -Castigada Meredith- Gritaba Taylor desde la cocina -Genial, ahora tengo que secar a esa bola de pelos o si no, terminara enferma- Decía Taylor a la vez que apagaba la salsa, que ya estaba lista y otro ornilla mas de aquella estufa 

Karlie hacía 5 minutos que había llegado al edificio y (como antes de que Taylor apareciera) subió por las escaleras, con aquella incertidumbre de lo que había pasado solo hace media hora en la casa de Jessica 

*FlashBack*

-Vamos, Karls. Pasa por una copa de vino, nada más- Le rogaba Jessica

-Dos cosas, Jess- Tomó un respiro, intentando calmarse y no ser brutal -Sabes que no quiero que me digas Karls, de verdad lo hemos hablado, sabes que...- No la dejo terminar 

-Taylor te decía así y te lastima que te lo digan- Citó Jessica

-Gracias- Le dio una sonrisa tratando de calmar la situación -La segunda, Jess. Es que he generado un compromiso, y tu mejor que nadie sabe que me gusta llegar a tiempo a todo aquello que yo considere un compromiso- Se iba a acercar a darle un beso en la mejilla, pero Jessica se había retirado -Vamos, Jess- Karlie ya estaba a punto de molestarse 

-No Karlie- Le dijo claramente molesta -Mira, he aceptado que te reunas con esa falsa rubia para que sean "amigas"- Remarco las comillas -Pero no voy a aceptar que estoy dando todo de mi para poder hacer que la olvides, porque si mal no recuerdo, tu me dijiste que no querías seguir atada a ella y querías avanzar... Karlie yo te sigo viendo estancada- Jessica estaba que echaba humo por las orejas -Si tu vas a jugar conmigo como la otra insulsa hace contigo, entonces no cuentes conmigo- Le dijo furiosa, cerrando la puerta al finalizar, pero Karlie detuvo aquella acción

-¿Quieres ser mi novia?- Aquella pregunta había sido, cuando menos impulsiva y molesta para sí misma

-¿Que?- Quiso rectificar Jessica, que al parecer todo aquello la había dejado pálida 

-Si tu...- Estaba titubeando, ni siquiera estaba segura de si estaba respirando -¿Quieres ser mi novia..?- La verdad es que para ese punto ya estaba segura que eso no era lo que quería 

-¡Oh por dios! Karlie, Claro que sí- Y de un brinco se aferró a las caderas de Karlie, quien sin ninguna especie de chispa la sujeto para que no cayera -Te voy a hacer muy feliz, mi amor- Le decía Jessica, con aquella voz chillona que Karlie le molestaba, porque Karlie era feliz sin llamar la atención, sin embargo, ya eran como 5 personas que las volteaban a ver, un par con sonrisas y los otros 3 igual de extrañados que ella -Hay que celebrar esto amor, mañana te llevaré al mejor restaurante, te lo juro- Y entonces una lluvia de besos molesto, sonoros y con exceso de saliva invadieron la cara y boca de Karlie...

Bad Blood 2.0 (Kaylor)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora