Todo cambia.

¿Celos?

-Um... Pues entonces tendrás que estar sola. -Dijo Phoebe.

-Pues... Seria mejor estar sola a escuchar a ese inútil.- Exclamó Helga.

-Ya seria tu decisión Helga... tú eliges.

-Bueno Phoebe tienes razón... es solo que ese chico no se, es diferente conmigo.

-Talvez le agradas... ¿No crees?.

-Hay Phoebe por Dios santo de donde sacas tal idea. Le agrado uf... por favor- Dijo Helga en modo de burla.-Bueno Phoebe te dejo tengo que ir a cenar mañana iré después de clases a tu casa para pasarte los apuntes.

-Claro Helga gracias.- Terminando de decir eso Phoebe, Helga colgó el teléfono y bajo a cenar.

-Hasta que te apareces Olga, siéntate a cenar.- Le dijo Bob

-Soy Helga papá... *Acabando de cenar Helga se dirigió a su altar poniéndose de rodillas a alabarlo.*

-Oh Arnold mi amado la razón por la que vivo, la cucharada de azúcar en mi amarga vida ¿Por qué cuando intento hablarte buscas una excusa para irte? Es que acaso no quieres herir mis sentimientos diciendo que no sientes nada por mi y que no te importo... Talvez es hora de decirte que yo era aquella chica de San Valentín.- Dijo Helga. *De repente se levanto bruscamente*- ¡No! eso sería demasiado je je je bueno amado mío iré a dormir sabiendo que tu estas descansando en tu casa de huéspedes rodeado de buenas personas, buenas noches amado mío. *Después de esto ella bajo a ponerse la pijama para luego recostarse en su cama y quedar profundamente dormida.*

*Por otro lado en la casa de huéspedes.*

-Oye Helga tú... Tú también me gustas. -Le dijo Arnold a Helga que estaba a su lado escuchándolo.

-¿Y por que si soy lo contrario a lo que tu buscas?. -Le pregunto Helga cruzándose de brazos.

-Por que... Por que yo he visto desde tu frío y áspero exterior hasta tu dulce y tierno interior, y quería saber si tú... si tú...

-¡Arnold!¡Arnold!¡Arnold!.

*En ese momento el sueño de Arnold había sido interrumpido por su alarma. Arnold como si nada fue a vestirse para la escuela y bajo a desayunar. Cuando bajo su abuela Pookie ya había dejado el desayuno preparado en la mesa para lo cual Arnold solo se sentó a desayunar, cuando termino salio a esperar el Bus, para que cuando se subiera se encontrara con la sorpresa deque Helga estaba sentada con Alexander en la parte trasera del Bus compartiendo risas y platicando muy cómodamente, Arnold sintiendo un enojo que salia de su pecho siguió su camino hacia donde se encontraba su amigo Gerald.*

-Oye Arnie ¿Qué te paso? ¿Por qué esa cara de homicida desatado?. -Le preguntó Gerald al notar la aura negra que emanaba Arnold.

-Nada Gerald... Es solo que es extraño ver a Helga con el chico nuevo otra vez juntos.

-No... Arnold.... No me digas que sientes celos de Alexander.- Le dijo Gerald en tonó de burla mientras reía.

- Claro que no Gerald.- Respondió Arnold secamente.

*En ese momento los dos voltearon para observar a los chicos de atrás del Bus y escucharlos.*

-Helga... Entonces ¿Quieres ir a Slaucens por una malteada hoy?. -Le pregunto Alexander a Helga un poco timido.

-Um... Claro por que no. -Le contesto Helga amablemente.

-Ves de eso te hablo... Helga nunca ah tratado asi a alguien y mucho menos a mi. -Dijo Arnold enojado y de brazos cruzados.

-Vaya viejo estoy empezando a sospechar de que te gusta Helga...

-Claro que no Gerald como pasa a creer eso. -Dijo Arnold a la ves que bajaban del Bus para entrar ala escuela.

-Ok Arnie pero te seguiré vigilando.

*Durante toda la semana Arnold no recibió señal alguna de Helga ya que se la pasaba hablando con Alexander o tomando apuntes para Phoebe. Y en las tardes despues de la escuela Alexander y Helga iban a tomar malteadas a Slaucens y a platicar.*

-Oye te puedo contar algo y me juras no decírselo a nadie. -Le dijo Helga a Alexander mientras ambos tomaban sus malteadas.

-Claro Helga considérame un buen amigo para ti. -Le dijo Alexander y luego le guiño un ojo.

-Bueno es que... Me gusta mucho Arnold...- En ese momento Alexander sintió un odio terrible hacia Arnold, desde ahí lo considero como un obstáculo en el camino había su objetivo... estar con Helga.

-Oh... ¿Y cual es tu objetivo?. Le pregunto Alexander simulando una sonrisa.

-Pues talvez hablar con él ¿O crees que es mucho?

-No... Esta bien esta muy bien. -Seguía con su sonrisa falsa por que en el fondo se sentía fatal.

-¿Y cual es tu objetivo?.- Preguntó Helga curiosa mientras lo veía.

-¿Mi objetivo? *Mi objetivo es enamorarte cada día mas y tan pronto como pueda* - Pensó Alexander- Um... No... Yo así estoy muy bien.

En ese momento alguien los veía muy celosamente desde el otro lado de la calle.