Narra Lucas.
—¡¿Por que lo hiciste?!— le grité a Jordan una vez que llegamos a su casa.
—Lucas tranquilizate— me dijo soltando las bolsas de la despensa y camino a mi mirándome preocupada.
Sentía mi sangre hervir por la rabia y la cólera que inundaba mi cuerpo. Quería golpear algo, quería llorar, quería que Jordan me abrazara, sentía un millón de emociones que me hacían perder el control.
—¿Como quieres que me tranquilice? si aceptaste pasar Navidad con mi asquerosa familia— le grité no midiendo mi tono y sintiendo que que en cualquier momento explotaría.
Jordan me miró sorprendida pero parecía que trataba de entenderme. Pero no, ella no entendía, no entendía nada.
—es tu familia cariño no puedes vivir toda tu vida peleado con ellos, velo como una oportunidad de empezar de cero— dijo nerviosa acercándose a mi.
La miré fijamente y me aleje de ella dando un paso atrás, Jordan me miró dolida pero no hizo nada más.
—Yo no quiero empezar de nuevo. Ellos se alejaron, ellos no me buscaron, fueron ellos los que a mis jodidos 12 años me internaron en la maldita escuela militar valiendoles un bledo que sería de mi. ¡Ellos me obligaron a esto!— grité por último sentándome en el sofá para después tomar mi cabeza entre mis manos.
Podia sentír la mirada de Jordan pero no me dijo nada más y se quedó parada a mitad de la sala.
Me sentía mal conmigo mismo por gritarle ya que ella no tenía la culpa de nada, a eso sumándole mis otras emociones decidí que lo mejor era ir a despejarme así que sin decir nada me levanté y salí corriendo de su casa.
...
Eran las 4 de la mañana cuando toqué el timbre de casa de Jordan temblando y con mis mejillas húmedas por las lágrimas que corrían por mis mejillas. Casi de inmediato la puerta se abrió y reveló a una Jordan vestida con una pijama color lavanda que me miraba con un sin fin de emociones en sus ojos que estaban hinchados.
Oh Bellamy eres un imbécil.
—Lo siento— dije sintiendo un nudo en la garganta nuevamente.
Jordan me sonrió de lado ante la disculpa y me tendió su mano, la tomé desesperado y después de un tirón acerque a Jordan a mi. Su calor al instante me envolvió y aunque yo estaba muriendo de frío podía sentir que estaba a salvo solo sintiendo sus brazos a mi alrededor.
—Oh Lucas te vas a resfriar— susurro en mi oído mientras me abrazaba.
No queriendo que me soltara la tomé en mis brazos y cerré la puerta detrás de mí, Jordan se aferró a mí y envolvió sus piernas en mi cadera. Caminé con ella hasta el sofá y me senté con ella arriba y nos quedamos en silencio aferrados el uno al otro.
El ambiente no era incómodo pero ambos nos sentíamos culpables y teniamos mucho que decirnos pero ninguno era capaz de dar el primer paso.
Ninguno de los dos habló en un muy largo rato.
—Sube y date una ducha caliente— habló aún aferrada a mi cuello— mientras yo te prepararé algo caliente.
Asentí aún teniéndola entre mis brazos. Cuando jordan se enderezó cruzo miradas conmigo y con suma delicadeza me acarició el rostro.
—Estaras bien— dijo en un susurro antes de acercarse a mí y besarme.
Sólo fue un simple roce pero pareció que ese era mi remedio, y es que un simple beso de ella podía ser la cura de mis peores males.
—No tardaré pequeña— dije sonriendole.
Jordan me sonrió devuelta, se paró y caminó a la cocina. Yo por mi parte subí a ducharme.
...
Jordan y yo estábamos acurrucados en el sillón envueltos en mantas mientras tomábamos una taza de chocolate caliente.
Ya hacia un largo rato que estábamos así pero ninguno decía nada.
—Lamento lo de esta tarde— dijo Jordan rompiendo el silencio.
Deje de mirar a la nada y me enfoque en ella.
—Yo se que no soy nadie para decidir las cosas por ti pero créeme que al aceptar la invitación lo hice con la mejor de las intenciones— dijo mirándome apenada pero sus ojos no se apartaron de los míos.
—Nena..— quise hablar pero Jordan me calló.
—Yo se el resentimiento que les tienes pero no quiero que toda la vida lo tengas. El odio, el dolor y la tristeza no tienen porbque inundar tu alma si existe la opción de perdonar Lucas— habló esta vez tomando mi mano entre las suyas— aveces hay que aprender a perdonar y yo sé que lo que tu familia hizo en especial tu madre fue horrible pero aun así ellos son tu familia.
Tomé la mano de Jordan y la acerque a mi boca para besarle el dorso.
—Lamento haberte gritado— comencé mirándola como ella lo hizo—eso no fue correcto y más porque tú no tiene la culpa de lo que halla ocurrido con nosotros. Yo sé que tienes las mejores intenciones y agradezco que te intereses por mi pero esto es muy difícil.
Jordan se acercó a mí y me abrazó.
—Todo estará bien ya lo veras— dijo tranquila y después me abrazó.
La estreche más fuerte entre mis brazos para sentirla más cerca, el simple roce de su cuerpo con el mío y el poder sentir su respiración en mi cuello me tranquilizaban.
Suspiré sintiendo que no estaba lo suficientemente cerca.
Así nos quedamos en el sillón y poco a poco fui cediendo a los brazos de Morfeo, mi último pensamiento fue que en dos días sería navidad y mi decisión de ir o no iba a ser muy difícil.
...
¡Nuevo capítulo!
¿Que tal?
Esta es la primera parte de un maratón jaja
A lo largo del dia iré subiendo lo demás.
xoxo
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El Soldado
RomanceJordan Lorentz es una adolescente normal que cursa su ultimo año de preparatoria, pero en lugar de preocuparse por su vestido y pareja de graduación esta chica debe preocuparse en conseguir un empleo debido a las exigencias de su padre. No sabiendo...