Se los dije

157 18 15
                                    

Había pasado unos dos meses desde nuestra última aventura y todo marchaba bien, todo estaba tranquilo y no había problemas para nadie, inclusive había un nuevo miembro en la banda, y no, no era Jun Jie, él había regresado a las Cavernas del Este, se trataba de un chico castaño, de ojos verdes esmeralda,de la misma altura que Eli, un peculiar peinado, con una babosa también peculiar a la que él llamaba "Flautista", y lo más raro de todo, el venía de la superficie.

Eli y los chicos de inmediato tomaron confianza con él, pero yo aún no lograba confiar demasiado, me parecía algo sospechoso y me recordaba a alguien, pero no lograba definir a quién, el chico tenía por nombre Tad, aunque por el bien de todos yo intentaba fingir que confiaba en él.

Lo entrenabamos entre todos, y debo admitir que tiene bastante resistencia, soportaba los entrenamientos, incluso los de Kord.

Por las mañanas, después del desayuno, Tad tenía práctica de combate cuerpo a cuerpo con Twist y conmigo.

-Bien Tad, lo que haremos hoy será aprender a derribar, si el oponente te tira, y debes levantarte rápido y como bonus quieres tirarlo a él también, ¿que haces?- pregunté con una mirada y porte serio.

-¿Levantarme y darle un puñetazo?- dijo con voz dudosa, para él yo era la más estricta en sus entrenamientos.

-Pruebalo y veamos si tienes razón- yo era una fiel creyente de aprender sobre la marcha.

Twist y Tad se colocaron en posición, lucharon un poco antes de que Twist lograra derribarlo y cuando Tad estaba en el piso, se levantó e intento propinarle un puñetazo en el rostro a Twist, pero él lo esquivo, tomo su brazo que se encontraba sobre su hombro y de un rápido movimiento, lo dejó de nuevo en el suelo, sacó su arma, descargada, y apunto hacia Tad en señal de que la lucha había acabado.

Twist guardó su arma y ayudó a Tad a levantarse, ya de pie, un poco avergonzado y sucio, Tad dijo.

-Eso no salió bien, entonces, ¿que debería hacer?- lo miré fijamente y con seriedad y le dije.

-Observa mis movimientos, puede que aprendas más que simplemente como derribar a tu enemigo- luego de eso me puse en posición, quería que Twist peleara conmigo para que Tad observara e intentara imitar los movimientos.

Twist dudó, hace mucho que no peleábamos cuerpo a cuerpo, más específicamente, desde que dejamos de ser rivales, el hecho de que fuéramos pareja también complicaba su decisión, el simplemente no quería lastimarme.

-Vamos Twist, esto no sera muy diferente a cuando eramos rivales- dije con una sonrisa retadora y un tono se voz irónico.

Twist sonrió y se puso en posición, arremetí primero con una patada al estómago, Twist retrocedió y la esquivó, me acerqué un poco y volví a intentarlo, pero esta vez la patada iba dirigida a las costillas, Twist tomó mi pierna y la jaló, caí de lleno al piso deteniemndome un poco con las manos para no golpear mi cabeza, Twist soltó mi pierna e iba sacar su arma pero de una patada desde el suelo tumbé el arma de su mano, otra patada fue a parar a sus piernas y lo hice caer, tomé su arma y estando él en el suelo le apunté con la mía.

Él solo rió y yo lo ayudé a levantarse, le devolví su arma y luego dijo.

-No has perdido el don, aun sigues siendo buena en esto- dijo con una sonrisa.

- Pues tu tampoco has estado mal, sigues siendo digno de el nombre Twist- dije con un poco de gracia.

En un rápido movimiento me tomó de la blusa y me robó un beso en los labios que no duró mucho, luego dijo.

- No me llaman así por nada- yo simplemente estaba sonrojada, me había besado frente a Tad, quien nos veía con sorpresa, y no era por menos, el no sabía que eramos pareja.

Especiales BajoterraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora