—¡Te lo dije! Debe estar flipado contigo, pero le es difícil admitirlo.– decía Richard mientras comía una rebanada de pizza.–¿Tú qué dices More?
—Yo pienso lo mismo. Sé que te cae mal. Es egocéntrico, egoísta, tonto, idiota, imbécil, mujeriego... Pero no está nada mal. Tienes que decirme cómo le va en la cama y listo.–dice mi mejor amiga. Richard le da un suave golpe en el hombro.
—Yo lo odio, él me odia, nos odiamos.–bufé.
—A mi me cae mal, pero si está enamorado de ti, podemos divertirnos un poco...– habló Richard con una sonrisa cómplice mirando a Morena.
—A ver, ¿piensan que ese imbécil está enamorado de mi? Se me hubiera declarado entonces.– me crucé de brazos.
—¡Es un maldito mujeriego TN, no sabe amar!–gritó
—Tranquila Morena, tranquila...– la calma mi mejor amigo.
De repente se escucha el timbre. Los tres fruncimos el ceño. Es la medianoche. ¿Quién vendría ahora?
Morena caminó hasta la puerta.
—Si la secuestran, no me hago cargo.– dice tomando un poco de gaseosa.
—¿Me alcanzas un poco de Fanta?– le pregunté.
—No, ven a buscarla, o mejor dicho, quítamela.
Me acerqué y con mi mano agarré la fanta. Richard toma mi brazo y lo muerde. Solté un fuerte grito. Odiaba que haga eso.
—¿Por esto no me dejabas entrar Moren... Uhm... Buenas noches.
—¿Qué haces aquí? ¿Quién te dejó entrar?– dijimos los dos al unísono.
—Morena es mi pareja, me invitó esta noche...– dice con su sonrisa egocéntrica. Mi amiga habló.–Eso no es cier... – Pero fue interrumpida por el castaño, –Sí Morena, me acabas de invitar.
—¿Cómo te va a invitar si nosotros no teníamos planeado nada?– fruncí los labios.
Golpean la puerta otra vez. Quién será ahora. Me levanté pero Christopher no me dejó.
—Voy yo.–me guiña un ojo y va hasta la puerta. Lo odio, lo odio, lo odio.
Escuchamos que la puerta se cerró. Miro hasta la entrada y estaba mi novio.
—Pensé que si venía, no te ibas a sentir sola. Pero ya veo que no.– murmura las últimas palabras mirando al castaño que estaba a mi lado.
—Lo invitó Morena. Quédate.– lo tomé de la mano. Él sonrió de lado y dejó la mochila que traía, en el suelo.
Richard puso una película. Zabdiel y yo nos sentamos en el gran sofá, Richard en el suelo y Morena con Christopher en el suelo también sólo que algo alejada de Richard.
—¡Carajo!–gritó mi amiga al ver como la 'llorona' aparecía en la pantalla.
—Tranquila..–escuchamos un susurro. No le tomé importancia y seguí mirando la película.
En un momento ví que Morena se estaba besando con Christopher. Ya que los escuché. Miré a Richard y su mirada notaba tristeza. Le hice cosquillas en su cuello y sacó una sonrisa. Zabdiel estaba atento a la película mientras con sus dedos acariciaba mi brazo.
—Nos vamos arriba.– avisa Christopher.
Asentimos y seguimos viendo la película. Encienden la luz y los tres nos paramos de nuestro lugar. —¡Apaguen la luz!– gritamos al unísono. Morena rió y apagó la luz. Soltamos un suspiro y seguimos mirando la película.
—Sólo estarán una noche, sólo estarán una noche...–susurra mi amigo.
—Richard.– lo llamé y volteó.– No les des importancia. Morena soñó con esto, sólo quiere acostarse...–reímos.– ¿Qué les parece ir a la playa?– pregunté.
—Me encantaría...–dijo Zabdiel.
—También. Además, hace demasiado calor.– murmuró el moreno.
—Richard, ¿tienes tu camioneta?–pregunté.
—Aunque sean las dos de la madrugada. Nunca se deja de ver lindo este lugar.– dice Richard sentándose en la arena. Me limité a hacer su misma acción. Sacó su teléfono y puso la cámara.–¡Selfie!–grita. El flash me mata los ojos. Escuché el sonido de que se capturó la imagen. Pasé mis dedos por los ojos para que se recuperen del ataque de luz.
—La publicaré en Instagram.–dice sonriendo.
Zabdiel entró al agua y soltó un suspiro de lo fría que estaba. Yo reí y seguí mirándolo.
—¿Vienes?–pregunta Richard. Negué con la cabeza y caminé hasta su camioneta. Puse música con mi celular. Música tranquila. Estoy cansada de esas canciones de reggaeton o rock que suenan en las fiestas. Mientras la música sonaba, entré a mis redes sociales. Facebook.
Morena Adams está en una relación.
Fruncí el ceño. ¿Por qué nunca me lo dijo? Oh, lo publicó hace cinco minutos. ¿¡Qué!? Cinco malditos minutos. ¿Con quién? ¿Cómo?
Abrí el WhatsApp y le mande un mensaje:
"MORENA ESTEFANIA ADAMS"
Visto
PORQUÉ NO ME HAS DICHO QUE TÚ SALIAS CON ALGUIEN"
V
