El dia a dia de unas chicas cuyos objetivos las llevarán a tener una vida interesante y llena de muros por superar.
Amores, separaciones, exámenes, desamores, acontecimientos inesperados, desilusiones, cambios para bien y para mal es lo que vivirá...
Las miradas de aquellas dos chicas chocaban como si fueran las peores enemigas de todas, pero lo extraño de la situación era que no se conocían para nada. Negro contra Azul creaban una atmósfera tensa y misteriosa; la joven de mayor altura y cabello largo con grandes bucles no sabía porque se sentía de esa manera, tan confusa, solo sabía que algo en la joven de ropa formal y botas altas no le agradaba para nada y sentía que debía vigilarla.
- ¿Rose, está todo bien? - Preguntaba una chica muy joven de cabello corto y piel pálida.
- ¿He?. Si, si, estoy bien - respondió la nombrada al momento que apartaba su vista de la joven misteriosa.
- Te veías distraída. ¿Viste algo que te desagradó? - dijo inocentemente la caucásica.
- No, para nada Perla, solo estaba preguntándome algo - "El por qué esa chica me veía fijamente" pensó Rose.
- ¡Hey¡ Chicas, mejor nos vamos yendo al salón de clases, - Interrumpió Rubí, una chica de baja estatura y porte rudo.
- Rubí tiene razón, sonara la campana justo ahora. - Afirmó, la única que no había hablado hasta el momento de aquel pequeño grupo de cuadro muchachas.
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Y así, como si la joven de semblante serio y ojos tapados por su cabello tuviera algún tipo de poder de predecir el futuro, la campana sonó, dando a entender a todos los presentes en la cafetería el fin de la hora de almorzar.
Los adolescentes de la escuela se dirigían cada uno a sus respectivos salones mientras conversaban de sus planes para el fin de semana, algunos irían a fiestas, otros jugarían videojuegos en sus casas y algunos viajarían a otra parte de la ciudad, por otro lado nuestras protagonistas estaban planeando tener una pijamada en la casa de la mayor, de diecisiete años, Rose Quartz Stars, para celebrar el final de la entregas de trabajos; se tuvieron que separar pues no estaban en el mismo año escolar.
Rose, siendo la mayor, estaba en último año, junto a Zafiro, que le seguía en edad por un año, en primero de preparatoria estaba Rubí, de quince años recién cumplidos, y por ultimo estaba la más joven del grupo, Perla, con tan solo trece años y en segundo año de secundaria; algunos se preguntaban cómo es que la joven de semblante tímido había logrado juntarse con chicas tan mayores que ella, la verdad es que ella conocía a Rose desde hacía dos años cuando la mayor la ayudó con un problema que la menor tenia, desde entonces, para Perla, Rose se volvió la persona que más admiraba, siendo tan fuerte, libre, amable y maravillosa a los ojos de la delgada muchacha.
Rose se sintió responsable de Perla luego de aquel incidente, le tomo el cariño que tendría una hermana mayor a su pequeña hermana menor y no pudo dejarla fuera de su grupo de amigas cuando Perla entró en la misma escuela que ella, sentía un aprecio muy fuerte y un deseo de protegerla inmenso.
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- Rubí Flame vaya a la oficina de la dirección, Rubí Flame, a la oficina de la dirección - Se escuchó por toda la escuela gracias a los altos parlantes.
