Sintiéndome completamente débil y vulnerable me paré y con lentitud mis pies se arrastraron hasta la puerta de mí habitación, mi mano se posó en la perilla y tomé aire antes de darle vuelta y abrir. Me asomé al comedor y allí estaba igual de bello que siempre hablando con todos. ¿Por qué había vuelto ahora, no debíamos esperar dos días más?
— Jin -hablé dejándome llevar por el impulso de verle ahí recibiendo la atención de todos, ¿Desde cuándo le abrazaban tanto y le daban tanto cariño? Eso definitivamente me molestaba. — ¿Qué haces aquí? -su mirada chocó con la mía.
— ¿No te dijo Bang que volvería? -me respondió con suma indiferencia, eso había dolido.
— Sí, lo hizo pero dijo que sería en dos días -murmuré un tanto incómodo.
— Sí, sería en dos días pero tuve que adelantar el vuelo ¿Acaso no vieron las noticias? -¿Las noticias? Pensé mientras mis ojos se clavaban en el televisor que dejaba ver los videojuegos de Hoseok y Taehyung pausados.
— ¿Qué tendríamos que ver, Jin? -Jungkook cuestionó con una ceja alzada y yo pude sentir como un escalofrío subía desde la parte baja de mí espalda hasta mi cuello, algo malo se avecinaba.
Pude ver a Yoongi caminar hasta el sofá por el control. Cuando encontramos las noticias pasamos algo de veinte minutos esperando por las del espectáculo y en cuanto comenzaron nosotros fuimos el blanco de ataque de críticas, bueno, yo fui.
“— ¿Realmente son ciertos los rumores que afirman que no sólo fue infidelidad si no también maltrato? -la periodista cuestionó haciendo que mis puños se cerraran.
— Según parece sí, se habla de unas posibles fotos de los moratones y las heridas de Seokjin que podrían salir a la luz ¿Creen ustedes que Kim Namjoon tenga el perfil de un maltratador? -agrego la encargada de decir todas esas ¿Mentiras? Bueno, técnicamente no eran mentiras.
— ¡La verdad yo jamás habría pensado algo así! -Oh, vamos ¿Siquiera piensas? Reí irónicamente mirando hacia otro lado — ¿Qué opinan sus armys al respecto?
— ¡Están confundidas! Vaya que lo están, si bien hubo un porcentaje de ellas que tomaron posición la mayoría está en el limbo, no sabe qué creer y que no ¡Y con razón! Con todo esto se repente supongo que todos interesados en esto estamos igual
— Ya lo creo, ¡Y en otras noticias!...”
El televisor se apagó y en un primer instante las miradas se posaron en mi, como si de por si no me sintiera lo suficientemente humillado ya ¿Qué tan miserable tengo que verme para que dejen de mirarme así?
— Por eso es que vine antes -Seokjin rompió el silencio y pese a que ahora las miradas se hallaban sobre él el sentimiento de estar siendo observado no me abandonaba. — necesito hablar contigo en privado, Namjoon -agrego poniéndose de pie ¿Que era eso que tenía que hablar conmigo? Tenía miedo.
Mi pasó era lento mientras lo seguía por el pasillo hasta su habitación, nuevamente mis pies se arrastraban y pese a que deseaba con todo mi ser poder mantenerme fuerte lo único que quería en ese momento era poder tirarme en mi cama, esconderme del mundo, esconderme de todo y todos ¿Esto era acaso lo que se conoce como karma? No lo sabía pero de serlo estaba pegándome duro, muy duro.
Ya dentro del cuarto Jin puso el cerrojo y aquello hizo que se formara un nudo en mí garganta ¿Iba a matarme acaso?— Debemos volver -cuando lo oí me costó procesar esa información y necesite pestañear unas cuantas veces antes de siquiera subir mí mirada hasta él ¿Volver?
— ¿Qué dices, es acaso una broma de mal gusto esta, Jin? -una de mis cejas se alzó y vi cómo él sonrió ¿Era esto divertido? — Sabes, no le encuentro la gracia a esto, Jin
Él se abalanzó sobre mi, pude sentir como sus manos se posaban delicadamente sobre mi pecho tal cómo lo hacían antes, realmente me sentía como si estuviera reviviendo una de las tantas veces dónde él me seducía antes de hacer el amor, me sentía en el pasado.
— ¿Qué haces? -tartamudee un poco, aún lo amaba locamente.
— ¿Realmente crees que quiero volver contigo en serio Namjoon? -murmuró sobre mis labios y una sonrisa se formó en los suyos ¿Desde cuando te habías transformado en una persona irónica Jin? — Bang dice que debemos hacerlo hasta que todos estos escándalos desaparezcan y por ende yo tendré que volver a la banda también ¿Acaso fue esto parte de tu plan maestro? -ese tono hostil que mantenía sumado con la cercanía no me estaban jugando a favor si realmente quería cambiar.
— Ya basta Jin, no me hables así -murmuré antes de relamer mis labios y alejarme un poco de él aunque rápidamente se acercó de nuevo ¿Qué estaba intentando?
— ¿Por qué no Nam? Hace no mucho solías disfrutar esta cercanía -su lengua recorrió sus labios casi a punto de rozar los míos y eso logro que mi corazón comenzara a latir con muchísima velocidad. — antes de hacer el amor te gustaba que me acercara a ti así, que te susurrara cosas al oído, que te tocara ¿Qué es diferente ahora? -estaba perdiendo la calma y esto podía acabar de dos formas, una era con él abajo mío en la cama, la otra era con él teniendo una mejilla roja ¿Cuál era peor?
— ¿Qué te sucede Seokjin? -cuestione bastante irritado intentando despegarlo de mí. Sus manos se habían aferrado a la parte trasera de mí cuello y sus brazos recaían sobre mis hombros ¿Por qué me sentía tan incómodo? — ya fue suficiente ¡Basta!
— ¿Qué harás, vas a golpearme? -su cabeza se ladeó un poco y una sonrisa se escapó de sus carnosos labios — sabes que te amo muchísimo Namjoon y me conoces, sabes qué clase de persona soy, por eso acepté y por eso es que estoy aquí ahora contigo -mordió su labio inferior, sabía perfectamente cómo tentarme.
— No entiendo de qué hablas -respondí con firmeza al menos debía pretender. Él suspiró.
— ¿Realmente no lo entiendes, bebé? -nuevamente esa sonrisa pícara se había apoderado de su rostro ¿Quién era este nuevo Seokjin y qué había hecho con el que yo conocía? — volveré contigo y volveré a la banda pero...
— ¿Pero? -hablé sin poder contener toda la ansiedad que sentía en ese instante.
— Todo tiene un precio ¿Sabes? Y eso es justamente de lo que esto se trata, del precio que te saldrá que yo haya vuelto a salvarte el pellejo -y finalmente entendí con claridad todo pero, ¿Estaría preparado para pagar ese precio? Y peor aún ¿Cuál era?