Día 25

97 7 0
                                    

Segundo Miedo.

Pero pasó el tiempo y me engañe a mi misma pensando que sólo serías un conocido más.

Fue todo lo contrario.

Nos hicimos confidentes y te llegué a querer mucho.

Fue ahí cuando tuve mi segundo miedo:

A que te fueras de mi vida.

Sabía que si en esos momentos te ibas, sería dificil acostumbrarme a no saber de ti, o a ya no hablar contigo.

Te lo dije.

Te dije en muchas ocasiones que no te fueras.

Me dijiste que no lo harías, que nunca se te ocurriría hacerlo.

Pero confíe en eso, en esa promesa.

Confíe en ti, así que cuando sí te fuiste no supe que hacer.

Pero fue mi culpa.

Yo nunca debí permitir que te conviertieras en el oxígeno de mis pulmones.

Por eso cuando te fuiste, sólo sentí que podía ahogarme.

Ya no estás tú©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora