Poco común

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No era fea, pero se lo creía. Tampoco inteligente aunque levantaba la mano muy seguido. En sus peores días al salir al receso lograba cubrir sus vergüenzas con capucha y auriculares.

Era mentalmente más fuerte comparada con toda la gente que le rodaba. Al menos eso quiero creer. Ya que por suerte o por desgracia aún no logro conocerla.

Empiezo a creer que no se deja conocer.

Complejos, hechizos y otras realidadesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora